Han pasado cuatro años desde que el hijo de Rocío Jurado y José Ortega Cano, José Fernando, ingresara en un centro psiquiátrico por su adicción a las drogas. No es el único famoso que ha estado interno por una enfermedad o problema mental. Muchos se han sincerado a lo largo de todo este tiempo sobre lo importante que es acudir a la ayuda profesional cuando se necesita para recuperar la sonrisa. En Cotilleo hemos hecho un recopilatorio de las confesiones más íntimas que han hecho algunos de los personajes públicos más conocidos del mundo del corazón que han pasado por un centro de estas características. Si quieres descubrirlo sigue leyendo y no te pierdas nada.
Rosa Benito recuerda su ingreso en 2014: «No es ninguna vergüenza»

> Rosa Benito es una de las famosas que ha tenido que recurrir en el pasado a la ayuda psiquiátrica especializada. Sus problemas como colaboradora en Sálvame y sus muchos altibajos con su ex pareja, Amador Mohedano, sumieron en un pozo sin fondo a la tertuliana, que terminó ingresada en un centro. «Yo estuve en un psiquiátrico. Para mí fue horroroso pero hoy lo cuento porque creo que la gente que hemos pasado por ahí podemos ayudar a otra gente. No es ninguna vergüenza», desveló hace unos años desde el plató de Sábado Deluxe cuando comentaban el ataque de ansiedad que Isabel Pantoja sufría en Supervivientes y por el cual deseaba abandonar el concurso.
«Mi ingreso fue voluntario. Le pedí a la doctora que me ingresase porque necesitaba separarme de todo. Ingresé al día siguiente a las 9:00 de la mañana. Para mí, fue muy liberador. Mi familia se fue llorando pero yo me quedé tan bien», se sinceraba. Aunque fueron unos años muy difíciles para ella saca una lección de todo esto y aseguraba que por fin, estaría totalmente recuperada. «Estoy curada. Me he tenido que curar del cerebro y del alma. O del corazón. Tenía muchísimas dudas. Durante muchísimo tiempo he luchado en contra de mis sentimientos», decía entonces.
María José Campanario interna a causa de su fibromialgia

> No es la primera vez ni posiblemente la última que María José Campanario tenga que ingresar en un psiquiátrico a causa de su enfermedad, a veces, invisible para los ojos del resto, la fibromialgia. Aunque en un principio negara los rumores pronto se supo que ha debido ingresar en varias ocasiones por culpa de su afección. «No es ninguna clínica de salud mental, no estoy en la unidad psiquiátrica, ni por depresión, ni por ansiedad, ni por tantas cosas que se han dicho. He ingresado en este centro de forma voluntaria para que me regularan la medicación«, afirmaba ante las insinuaciones de la prensa.
Todo ello vendría predeterminado por la enfermedad, pues esta le podría provocar otros síntomas como depresión, desórdenes alimenticios, insomnio y como no, dolores insoportables. «Tengo que ingresar cuando ya no puedo soportar el dolor de mil cuchillos sobre mi cuerpo. Las enfermedades reumáticas son complicadas, y básicamente lo que hacen cuando tengo una crisis es paliar el dolor», afirmaba. Aunque está muy controlada en cualquier momento podría volver a padecer un nuevo episodio que no pueda soportar sin ayuda médica.
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Julián Contreras: «No podía más, no quise seguir»

> La vida de Julián Contreras no ha sido nada fácil. Ha pasado momentos muy duros que han determinado inevitablemente su carácter. Los problemas económicos, las deudas y la depresión, le han acompañado gran parte de su vida. Ocurría en un momento donde tuvo que cerrar su restaurante ya que no podía hacer frente a los gastos. Llegó a decir en otra ocasión que ni siquiera tenía un sitio donde dormir y que sobrevivía con apenas 160 euros al mes y se quedaba en casa de amigos que le dejaban un techo para pernoctar. En una entrevista para Sábado Deluxe contó uno de sus peores momentos.
“Uno de los días más difíciles de mi vida es cuando me recetan las mismas pastillas que a mi madre», recordaba el hijo de Carmina Ordóñez, la cual tuvo que acceder a una clínica psiquiátrica por sus excesos. «Hacer el mismo ritual que hacía mi madre con las pastillas todas las noches, me costaba mucho. Alguna vez se me ha pasado por la cabeza quitarme la vida. Una noche lo vi claro, no podía más. Si hubiera tenido los medios me hubiese quitado de en medio”, afirmaba ante los colaboradores que le miraban atónitos.
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José Fernando Ortega Mohedano, cuatro años en un centro psiquiátrico

> José Fernando Ortega lleva cuatro años ingresado en un centro psiquiátrico para recuperarse de sus adicciones y así desintoxicarse. En todo este tiempo mantiene contacto estrecho con su padre el torero Ortega Cano y su hermana Gloria Camila. Según las informaciones que ya se conocen su evolución sería satisfactoria y llevaría una rutina marcada de actividades y ejercicios para salir adelante de su afección.
El marido de Ana María Aldón declaraba hace no mucho para la revista Pronto que su hijo merecía curarse. «Mi hijo mayor se merece una nueva oportunidad en la vida, y estoy convencido de que, por fin, se está tomando en serio su rehabilitación. Es un hombre nuevo». Gloria Camila, también tenía buenas palabras para él y su buena conducta. «Todos tenemos muchas ganas de que salga. Está muy bien, fantástico, súper guapo y cada día mejor».
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Alba Carrillo sufrió depresión tras su ruptura con Feliciano López

> Alba Carrillo tuvo una experiencia traumática a causa de su divorcio con Feliciano López, uno de los amores de su vida. Aunque ya lo tenga superado, sigue nombrándole, le guarda un rencor especial, pues sufrió mucho por él y cuando decimos mucho, no exageramos pues pasó por una terrible depresión que la llevó a tomar medidas concretas en beneficio de su propia salud mental. Fue un momento en el que se le unieron varios frentes, por lo que estalló irremediablemente. Su separación con el tenista, la batalla por la custodia de su hijo Lucas con Fonsi Nieto, la ruptura con David Vallespín y otros problemas en el trabajo fueron los motivos de su inestabilidad emocional.
Una depresión que encima, le producía unas graves y dolorosas migrañas. «Estuve ingresada en la clínica López Ibor, un centro especializado en psiquiatría y psicología, durante un día», aseguraba públicamente. «Me he intentado reír, salir por la tagente, bromear por ocultarlo pero he pasado una depresión. He estado verdaderamente triste, lo sabe mi psiquiatra«, decía después de intentar superar ese duro bache con su participación en la casa de Guadalix, Gran Hermano VIP.
Raquel Mosquera experimenta un brote psicótico en una recaída de su trastorno bipolar

> Raquel Mosquera ingresó en 2016 en la Unidad de Psiquiatría del Hospital Puerta de Hierro por una recaída de su trastorno bipolar. Justo después de regresar de manera oficial a la televisión para hablar sobre la boda de Rocío Carrasco, hija del que fuera su marido, el boxeador Pedro Carrasco. Desde 2006 vive con este trastorno, cuando se cumplían 5 años de la muerte de su ex pareja sufría un brote psiquiátrico que le hizo internar en la misma clínica por donde han pasado José Fernando Ortega o Alba Carrillo.
Los medios de comunicación incluso la grabaron hablando sola a través de la ventana de su habitación. No fue este el único episodio, pues llegó a sufrir dos ataques más y hasta intentó suicidarse. Algunas de las razones por las que experimentó dichos procesos fueron por dejar la medicación que debe tomar de por vida o por algunas épocas de estrés y tensión desmedida.