Antonio Banderas está en España. Es una de las pocas veces que el malagueño -ahora afincado en Londres- regresa a sus orígenes por motivos profesionales. Aprovechando su estancia en Madrid, ha salido a disfrutar de una comida a un conocido restaurante de la ciudad. A su lado, su novia Nicole Kimpel con la que mantiene una afianzada relación sentimental. A la salida, el actor y la empresaria no han dudado en dejarse fotografiar por los reporteros que aguardaban para verles.

Y es que hay muchas ganas de saber cómo se encuentra en estos momentos en los que ha presentado su nuevo proyecto profesional: una colección de joyas y relojes para hombre y mujer en colaboración con Viceroy. Antonio, que ya lleva algún tiempo embarcando en el mundo de la moda con su propia marca, Antonio Banderas Design, aseguró en la convocatoria de medios que «estoy en el momento perfecto para embarcarme en esta aventura porque ya que he empezado en el tema del diseño, me siento capacitado para esto».

Durante la charla con los medios, Banderas también aprovechó para dejar claro que, tras momentos algo convulsos, ha conseguido mantener una buena relación con Melanie Griffith con la que mantuvo una relación durante más de dos décadas. Quizás por eso de momento no tiene pensado pasar por la vicaria con Nicole: «Estamos muy bien así, no tenemos planes en esa dirección», explicó. Adiós a los rumores.

El viernes pasado estaba previsto que Gema Serrano acudiera al Deluxe pero no estuvo allí. Una semana ha tenido que esperar para conceder la entrevista definitiva sobre su relación con Bigote Arrocet. Como se recordará, el humorista y la empresaria fueron captados entrando en la casa que él tiene en Madrid. En ella se hospedan sus hijos cuando vienen a Madrid. Gema cuenta que su amistad con Bigote se inició hace cuatro años y niega que entre ellos haya existido algo más: “No es verdad lo que se está insinuando. Solo somos amigo”. También ha revelado que cuando las fotos fueron publicadas, “Hablé con Bigote y nos reímos. Él no le dio la menor importancia”. Sin embargo, Serrano cuenta que “lo he pasado mal. Es algo que me ha perjudicado en mi trabajo. No es fácil para una mujer ser empresaria y, en mi caso, que me reúno con hombres de negocios importantes, pues no favorece”.

La empresaria conoce a María Teresa Campos porque el humorista se la presentó. No obstante, entre las dos mujeres la cosa se reduce a un par de encuentros. En relación a Bigote: “Además de nuestra amistad, también compartimos temas profesionales. Son cosas de ASHUMES, Asociación del Humorismo Español, actos benéficos, galas…”

Desde que la polémica saltó en forma de imágenes, Gema Serrano y Bigote han mantenido el contacto. No obstante, no le consultó para ir al Deluxe: “Soy mayorcita y no tengo que pedir permiso. Él sabe que estoy aquí y le parece bien”. Acerca del paradero del humorista este fin de semana, no hay misterio: “Está de viaje con su hermana”.

Esta semana han salido más fotografías de otra mujer entrando en el piso que Arrocet tiene en Madrid: “Se llama Julia y es la dueña de la tintorería donde Bigote lleva los trajes”. Y una vez limpios, “se los deja en su casa”. Acerca de si pondría las manos en el fuego por el humorista, la empresaria ha sentenciado: “Yo pongo las manos en el fuego por mí, por nadie más”.

Gema Serrano ha contado que a ella también le ha llegado que existirían unas fotos comprometidas de ella y Bigote que no se podrían sacar porque habrían sido tomadas en el domicilio del humorista. Una planta baja con acceso al exterior. Reconoce que tenía interés “en limpiar mi imagen” y de ahí su entrevista en el Deluxe.

Según Mila Ximénez, Gema cuenta una versión de lo suyo con Bigote a sus amigos muy diferente a la que ofrece en los medios. Además, la colaboradora afirma que la empresaria tiene una estrategia mediática clara y que habrá más apariciones en televisión hablando del tema. Se supone, que de producirse lo que vaticina la panelista, contará lo contrario de lo dicho hasta ahora. Por su parte, la protagonista lo niega con rotundidad. “Hace muchos años que trabajo en la radio y jamás he tenido el menor interés en salir”.

El pasado 11 febrero de 2012, una de las cantantes más exitosas de la Historia de la música fallecía en una habitación de hotel de Califonia. No era otra que Whitney Houston, a quien habían encontrado muerta bocabajo en una bañera llena de agua caliente. Aunque la droga no fue la causa de la muerte, la autopsia reveló que la artista falleció por una combinación de fallo cardíaco debido al abuso de la cocaína.

En octubre de ese mismo año 2012, su hija, Bobbi Kristina Brown, anunció su compromiso con Nick Gordon, un amigo íntimo de la familia a quien Whitney había adoptado legalmente como hijo. El anuncio del compromiso fue tomado con cierta incredulidad dentro de la familia pues Bobbi siempre se refirió a Gordon como su «hermano mayor».

No fue mucho más tarde, en 2015, cuando la sombra de la desgracia volvía a llamar a la puerta de la familia Brown-Houston, Bobbi Kristina, era encontrada inconsciente en una bañera de agua caliente, cayó en coma y murió a los seis meses. Y la historia se repetía.

El pasado mes de septiembre, Gordon fue declarado «legalmente responsable» de la muerte de su pareja por haberle suministrado supuestamente un «cóctel tóxico» antes de abandonarla en la bañera de la vivienda que ambos compartían por entonces.

Es hoy cuando se ha publicado que un juez de Atlanta ha condenado a Nick Gordon, hijo adoptivo de Whitney Houston y viudo de su hija, a pagar 33 millones de dólares (unos 36 millones de euros) por negligencia en el homicidio de Bobbi Kristina.

Los contenciosos que enfrentan a Raquel Bollo y Chiquetete han hecho que Carmen Gahona pierda el temple, si es que alguna vez lo tuvo. Y es que Carmen, ávida de platós, tanto por necesidad económica como por enganche a la pantalla, intenta recuperar el protagonismo mediático.

En estos envites verbales que lanza Gahona una de las daminificadas es Lydia Lozano. Sin comerlo ni beberlo, la periodista se ha visto en el centro de la diana. Carmen apunta y amenaza con revelar una grave información. No podrá contarla porque aparte de que no tiene pruebas que la avalen, ¿en qué lugar quedaría Chiquetete? ¿Acaso quiere levantar el manto negro que cubre una de las grandes vergüenzas del artista?

De carácter impulsivo, Carmen es de las que cuentan carros y carretas de los colaboradores de televisión. Tiene para todos. Nadie escapa a su ira. Ni tan siquiera de los que afirma le caen bien. No es verdad. En cuanto alguien le lleva la contraria, se lanza en tromba. Eso sí, en plató da un pasito para atrás porque no es tan fiera la leona como la pintan.

Aunque hoy Rocío Cortés se posiciona al lado de Carmen, no está tan lejano el día en que realizó una entrevista previa para contar sobre la novia de su padre. Sin embargo, debido a que su testimonio no era convincente, la descartaron. La realidad es que ni ella ni su madre, Amparo Cazalla, soportan a Gahona. Consideran que es una mandona que quiere organizarles la vida y la prefieren más lejos que cerca.

Deseosa de chupar rueda mediática, Carmen lanza miguitas de pan que forman un camino hasta Guadalix. Sin decir, dice que será una de las concursantes de la próxima edición de GHVIP. A menos de que la liara muy gorda, y eso sirviera como revulsivo para la productora del reality, hoy no cuentan con ella.