Con el tema de Zayra, la hija de Guti y Arantxa de Benito, en pleno auge, no hemos podido evitar preguntarnos si esa conducta tan rebelde viene heredada de los propios padres.
Y es que hay más de un famoso que se ha quejado del difícil e indomable carácter de sus hijos, cuando ellos fueron igual o incluso peores, y sino que se lo digan a Rocío Carrasco. A continuación, vamos a exponerte a esas celebrities que traían de cabeza a sus padres en sus tiempos de mayor desenfreno.
Ya sabemos de quién ha tomado ejemplo Zayra Gutiérrez
> Todos hablan de la mala conducta de Zayra, la hija de Guti y Arantxa de Benito, pero, ¿acaso se han olvidado de las fiestas que se pegaban sus propios padres?
Guti ha sentado cabeza y ha formado una preciosa familia junto a Romina Belluscio, sin embargo, también tuvo su época de juergas y excesos. Y, precisamente, uno de los escándalos más sonados del ex futbolista tenía lugar en el año 2010, cuando fue pillado borracho y con una tasa de alcohol en sangre de 2,71, tras sufrir un accidente mientras conducía de manera temeraria por las carreteras de Estambul, en Turquía.
Recordemos que después de dejar el Real Madrid, Guti fichaba por el Beskitas, club en el que finalmente se retiraba de la vida deportiva. Algo, que supuso un gran cambio para él, ya que incluso se vio obligado a mudarse a Turquía una temporada. Allí pasó dos años en los que protagonizó algún que otro escándalo.
Días después del incidente, el futbolista salía a desmentir públicamente las acusaciones: «Se ha dicho que di 2,71 en el control y la verdad es que no he dado ni 0,71. Claro que bebí algo, porque cenamos después del partido, pero no iba borracho», aseguraba después de ser multado con 280 euros y perder el carnet de conducir durante 6 meses.
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Rocío Flores no es la única conflictiva de la familia
> Mucho se ha hablado también del conflicto y la guerra entre Rocío Flores y su madre, Rocío Carrasco. Madre e hija llevan años sin hablarse, concretamente desde un grave incidente obligara a la joven a abandonar el domicilio familiar e irse a vivir con su padre, Antonio David y la mujer de éste, Olga Moreno.
Pero, a pesar de que fuera Rocío Flores la que saliera escaldada, ya que judicialmente se le acusó de ‘maltratar y pegar en repetidas ocasiones a su madre’ e incluso llegaba a cumplir una condena de servicios a la comunidad, Carrasco también le causó algún que otro dolor de cabeza a Rocío Jurado durante su juventud.
Y es que ella también fue una niña rebelde, una niña solitaria a la que le gustaba escaparse, y que nunca quiso ser famosa. «No soy amiga del conflicto. No me gusta la tensión, no me gusta el mal rollo… Soy dueña de mis silencios y esclava de mis palabras. Y a mí la esclavitud no me gusta», aseguraba hace unos años en televisión. Pero, a pesar de ello, sin quererlo se ha visto envuelta en más de una polémica. Un embarazo siendo todavía muy joven, un conflictivo divorcio o un grave accidente que casi le cuesta la vida, son solo algunos de los incidentes en el historial de Rocíito que le supondrían más de un disgusto a la más grande.
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Embarazos inesperados y a edades muy tempranas
> Rocío Carrasco tenía un brillante futuro por delante, y además contaba con la ayuda de su madre, la gran Rocío jurado, para cumplir su sueño y dedicarse a la moda. Sin embargo, Antonio David se cruzaba en su camino, y todos los planes se iban al traste irremediablemente después de que se quedara embarazada. Una bomba que caía como un jarro de agua fría sobre la familia, y obligaba a la pareja a pasar por el altar poco después.
«Rocío se queda embarazada, se hace el test y le pide a esta amiga suya que vaya a la farmacia a recogerlo como si fuera un test suyo. El test da positivo y esta chica habla con una revista y vende la noticia», desvelaba Antonio David. Además, el tertuliano también ha dado detalles sobre la reacción de la cantante al descubrir la noticia del embarazo de su hija. Así, según él, a Jurado no le pareció mal, sino que le sentó peor a Pedro Carrasco, padre de Rocío, ya que no terminaba de aceptar que su hija de dieciocho años fuese a convertirse en madre tan pronto.
Algo parecido le pasó a Isa Pantoja, la hija de Isabel Pantoja, que se convertía en madre cuando todavía no había alcanzado la mayoría de edad. «Yo pensé que me mataba. Mi familia es muy tradicional, me dio un abrazo, se echó a llorar, se asustó un montón. Pero me dijo que estuviera tranquila», confesaba Isa sobre la reacción que tuvo su madre. «Querían saber si todo estaba bien. No le echo la culpa a mi madre porque se sentó a hablar conmigo, pero yo estaba muy rebelde», reconocía.
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Hijos rebeldes hasta en la realeza
> Ni siquiera las mejores familias se libran de tener que hacer frente a retoños con un carácter complicado, y sino que se lo digan a la Infanta Elena, cuyos hijos, Froilán y Victoria Federica, no han dejado de sacarla de quicio y protagonizar escándalo tras escándalo. Sin embargo, ese carácter tan indomable podría venirles de familia, nada más y nada menos que de su propia tía, la Infanta Cristina.
Fue apodada como ‘la Infanta rebelde’ en su momento, precisamente por sus constantes choques y desencuentros con la reina Sofía en su juventud, la cual no aceptaba sus ansias de independencia o de ser como los demás más allá de un título. Una tenso enfrentamiento entre madre e hija que se alargó en el tiempo, y que llegó hasta el punto de que Cristina se planteara abandonar La Zarzuela para irse a vivir sola al centro de Madrid. Algo, a lo que tanto Don Juan Carlos como Doña Sofía se opusieron.
Sin embargo, la Infanta terminó saliéndose con la suya y se fue a vivir a Barcelona. Esa lejanía terminó calmando los ánimos entre ella y la reina Sofía, aunque por poco tiempo, ya que el conflito volvía a surgir después de que Cristina escogiera a Iñaki Urdangarin como el hombre de su vida, algo que tampoco les hizo mucha gracia. Y es que esa relación le llegaba a costar años más tarde su puesto dentro de la familia real, después de que el ex baloncescista fuera implicado en el caso Nóos.
A pesar de todo, Cristina siempre se ha mantenido fiel a sus ideas, y queda claro que Victoria Federica tiene a quien parecerse y ha terminado heredando esa fama de ‘rebelde’ que ha dejado su tía.
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