La situación de destierro impuesto a la Infanta Cristina se complica cada vez más. Estas navidades, contra todo pronóstico, serán las últimas que la familia de Iñaki pase junta, por ello, ya se especuló con la posibilidad de que la Infanta junto a sus cuatro hijos, dejasen el frío de Ginebra, y se trasladasen a Portugal, país vecino con el que la monarquía española siempre mantuvo muy buenas relaciones. De hecho, Estoril, fue el destino que acogió a los Condes de Barcelona y a sus hijos durante años. Es precisamente esta cercanía y la posibilidad de mantener el “puesto de trabajo” en la Aga khan Trust of Culture, lo que hacía esta posibilidad más lógica para dibujar el nuevo futuro de Cristina.
Sin embargo, esta revista ha podido saber que al rey Felipe VI no le hace ninguna gracia que su hermana, con la que no mantiene relación afectuosa, se instale en un país, donde efectivamente la relación es muy cercana y personal, de hecho en este viaje oficial que los reyes Felipe VI y Letizia han realizado al país vecino, hemos podido conocer que el destino preferido de los reyes durante sus vacaciones privadas, para no ser descubiertos por la prensa y mantener el anonimato que doña Letizia ansía tanto, está en Portugal “siempre hemos recibido de los portugueses y de la que tuvimos cumplida prueba con ocasión de la visita que realizamos aquí como Príncipes de Asturias en el año 2012, y posteriormente en nuestra primera visita como Reyes en 2014. Además de mis visitas anteriores y tantas en el ámbito privado, tanto antes de mi matrimonio como después y con nuestras hijas”, confesó el rey “en ese profundo afecto y estima por la cosas de Portugal, me acompaña siempre la Reina Letizia”.
De hecho, esta revista ha podido saber que el destino en concreto es el imponente castillo de Sân Joâo de Arade, utilizado a modo de fortaleza por los monarcas españoles y propiedad de Vasco Manuel de Quevedo Pereira Coutinho, situado en el Algarve, donde ya pudimos ver fotos de la familia al completo en 2011. En aquella ocasión les acompañó la reina Sofía, y tan sólo una vez, durante la ausencia del rey, fue la madre de la reina la que estuvo junto a sus nietas e hija en 2011, ¿pero quién es este amigo íntimo de la familia nombrado marqués por el Rey Juan Carlos I? Sabemos que es un hombre discreto. Tiene 64 años y está casado con la arquitecta Isabel María de Carvalho con la que tiene dos hijos, Vasco, de 32 años, y Diogo, de 29. El matrimonio vive en Lisboa, en una lujosa casona, también de su propiedad.
Su nombramiento por parte del rey emérito como marqués pasó completamente desapercibido en el B.O.E. así como los motivos que le llevaron a su tan alta distinción. Sólo el rey puede conceder estas dignidades y siempre por lealtad a la corona e institución. Lo que nunca sabremos es cuales fueron esos motivos y se limitaba a destacar “la estrecha vinculación y profunda lealtad de la familia Pereira Coutinho a la Corona española que mereció en su día el reconocimiento de mi antecesor el Rey Don Carlos III y que merece nuevamente ser reconocida en la persona de Vasco Manuel de Quevedo Pereira Coutinho”.
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