No hay vuelta atrás. La periodista se encuentra en uno de los momentos más complicados de su vida. Parece que nada de lo que podría solucionarse, ha sido así. De hecho, todo son problemas en su vida. María Teresa Campos empieza a preocupar a sus más íntimos.
Una vida de luces y sombras
> Escribir sobre María Teresa Campos es hacerlo sobre una de las últimas grandes reinas de la televisión. Ha sido una de las maestras de la pequeña pantalla. Alguien al que admirar. No solo porque sus programas estuvieran cargados de audiencia, sino porque no se casaba con nadie. En sus entrevistas políticas, metía el dedo en la llaga a todos los partidos políticos. Se mostraba con naturalidad debatiendo sobre temas profundos como aquellos más banales. Sin embargo, sus días en televisión han llegado al final. Al menos en Mediaset. El pasado martes finalizaba su contrato con el grupo audiovisual líder en este momento. Y hasta el momento, María Teresa no se había pronunciado. Hasta hoy. Sus primeras declaraciones no solo intranquilizan, sino que preocupan -y mucho- a las personas más cercanas.
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Espera dolorosa
> Como suele ser habitual, María Teresa Campos ha escogido a Pilar Eyre para confesarse ante los últimos movimientos ocurridos sobre su vida. En este caso, para hablar por primera vez sobre el final de su letargo en Mediaset. Tras el cierre de Qué tiempo tan feliz, María Teresa ha ido teniendo papeles residuales en Telecinco. El fracaso de Las Campos tampoco ayudó mucho para que volvieran a confiar en ella. A pesar de que María Teresa sí se reunió e intentó presentar proyectos que estuvieran a su altura, nada se ha podido hacer para renovar el contrato que tenía con Mediaset. Así ha hablado ella, con un hilo de voz que preocupa y asusta: «Yo estoy esperando muy tranquila el final de mi contrato. Salen tantas cosas personales y profesionales que no son verdad que ya me río y no me creo nada», dice.
Durante su conversación, Pilar Eyre le insiste en que sería bonito verla presentado un programa de televisión como broche a una carrera profesional intachable. Aunque se hace la remolona, acaba confesando que: «Sería bonito. He leído y me cuentan muchos hipotéticos planes, pero a mí nadie me ha propuesto ninguno. Pilar, en serio, ni yo tampoco pregunto. Si hay algo ya me lo dirán», insiste. A pesar de que se muestra hierática, nadie en su entorno oculta la preocupación por la presentadora.
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Preocupación por María Teresa Campos
> Quienes conocen a María Teresa Campos la describen como una mujer extremadamente vulnerable. Insisten en que tras esa imagen férrea, se encuentra una mujer muy frágil a la que le afectan cosas cotidianas. Por eso el momento que atraviesa ahora es uno de los más complicados de su vida: «Estamos preocupados porque su estado anímico es difícil, tiene días muy buenos pero también días muy tristes y no le viene bien toda la presión mediática», dice alguien que la quiere bien. Sobre todo porque María Teresa todavía se siente con fuerza para emprender nuevos horizontes profesionales, pero se da de bruces contra una realidad que duele: ya no es rentable. Además, la relación sentimental con Bigote Arrocet no parece estar atravesando su mejor momento. Las personas de su entorno están más pendientes que nunca de ella e intentan que su día a día sea lo más ameno posible. Pero la última discusión con Bigote le ha devuelto a una realidad dolorosa.
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La discusión definitiva
> La matriarca de las Campos no está de acuerdo con la rutina que está siguiendo su pareja en los últimos meses. Concretamente con los continuos viajes de Bigote Arrocet al otro lado del charco. Y es precisamente la última escapada del humorista lo que podría dictar sentencia y marcar el final de esta mediática relación. «Ha estado dos semanas en Panamá y Miami. El miércoles antes de irse durmió en su apartamento de soltero de Madrid”,comenzaba a decir el periodista Jesús Manuel Ruiz en el programa Estando Contigo de Castilla-La Mancha.
Al día siguiente estuve en la noche de Madrid en la discoteca Morocco. Estaba él pero tampoco estaba ella. Esa noche sí fue a dormir a la casa de María Teresa, pero también me consta que el martes hubo entre ellos una gran discusión. La palabra la va a tomar Bigote Arrocet, porque María Teresa Campos no», añadía el citado periodista, asegurando además que muchas personas del entorno de la periodista no están nada de acuerdo con esta relación.
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El feo a Terelu y Carmen como punto de inflexión
> Desde hace un tiempo el comportamiento de la pareja deja en evidencia que el periodo de luna de miel ha acabado para siempre. No hay posibilidad de recuperar aquella magia. Las alarmas saltaban cuando semanas atrás Bigote presentaba en el bingo Las Vegas una colección de americanas diseñadas por él. Un evento en el que recibió el apoyo de numerosos rostros conocidos. Asraf Beno, José Manuel Parada o Conchita la poligrafista no se perdieron del debut… Y aunque hasta aquí es todo normal, hay un hecho que no pasó desapercibido: la ausencia de María Teresa.
Ni ella ni sus dos hijas estuvieron presentes en un día tan especial para el chileno. Además, la explicación que dio Terelu, lejos de calmar los ánimos, logró justo el efecto contrario. Con las palabras de la colaboradora de Sálvame quedó claro que las cosas no marchan tan bien como deberían. La primogénita de María Teresa aseguraba que ni ella ni su hermana tenían constancia alguna del evento. Edmundo no las invitó a asistir.
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