Ya nadie tiene dudas de que don Juan Carlos no se casó con doña Sofía por amor. Eligió a la candidata ideal. Tal como le dijo su padre, no podía tener pasado. Poco duró la felicidad a la pareja. La reina pronto descubrió a quién se había unido. Durante años, la reina ha callado. Sin embargo, alguien que fue testigo directo de su sufrimiento ha hablado sobre cómo ha afrontado las humillaciones de su marido. Un testimonio durísimo que puedes leer a continuación.
Juan Carlos cumplió con su deber
> Don Juan Carlos demostró desde muy joven que le encantaban las mujeres. Dejó claro que había heredado una de las características más conocidas de los Borbones. Llegado el momento de sentar la cabeza, el príncipe siguió los consejos de su padre. Fue conocer a la princesa Sofía y darse cuenta de que era la ideal para acompañarle en su vida oficial. De la privada ya se cuidaba él.
Quienes conocieron a don Juan Carlos en aquella época señalan que el rey nunca ha estado enamorado de su esposa. De hecho, al respecto, él mismo ha hablado de la cuestión con mucho pragmatismo dejando claro que Cupido no le tocó con sus flechas. El problema es que ella sí estaba enamorada. Entre esto y su sentido de la monarquía, la vida de doña Sofía ha sido un auténtico calvario.
Siguiente: Doña Sofía y su capacidad de aguante
Doña Sofía y su capacidad de aguante
> Si algo le gustó a Franco de doña Sofía fue que se lo tragaba todo. Jamás se quejaba por más fuertes que soplaran los vientos. Una persona que la conoció en profundidad explica los motivos por los que la reina ha aguantado tantas humillaciones de don Juan Carlos: “La reina está comprometida con el rey. Está en su ADN. Ella es la reina y estaría dispuesta a aceptar incluso que la amante del rey estuviera en la cama con él”, tamaña confesión se encuentra en Ladies of Spain, de Paul Preston.
Desde muy pequeña, doña Sofía aprendió la lección. La Corona estaba por encima de todo. No hay circunstancia que pase por delante. De hecho, la reina lo ha escenificado públicamente llegando a un punto sorprendente: “No se hablan (Juan Carlos y Sofía). Fingen hablarse en los eventos públicos. Ella ha llorado mucho por las amantes de él. Estaba muy enamorada de él”.
Siguiente: Elena, Cristina y Felipe, marcados por la relación de sus padres
Elena, Cristina y Felipe, marcados por la relación de sus padres
> Los hijos de don Juan Carlos y doña Sofía han sufrido por las desavenencias maritales que han visto en palacio. Esto ha hecho que cuando el rey se ha opuesto a alguna de sus relaciones, le hayan plantado cara. Eso sí, con mucho tacto porque está muy desaconsejado contrariar a don Juan Carlos. Ciertamente, el rey no ha puesto demasiado cuidado para que sus hijos no se enteraran de sus correrías. En la década de los noventa, Elena, Cristina y Felipe fueron testigos de las llamativas estrategias que su padre utilizaba para abandonar Marivent por la noche y encontrarse con Marta Gayá.
Una fuente conocedora de los entresijos familiares de Zarzuela, le explicó a Paul Preston: “Cuando el rey se va de cacería, sus hijos saben que es una excusa para pasar unos días con sus amigos y su novia del momento”. ¿Y cómo han reaccionado Elena, Cristina y Felipe a las correrías de su padre? “Por supuesto que sus hijos se enfadan con él. Lo desaprueban, sobre todo cuando perciben la infelicidad de su madre. No obstante, desde su nacimiento les han educado en la idea de que el rey es la persona más importante del mundo, no solo para su familia, sino también para España”.
Siguiente: La traición de Juan Carlos que Sofía no perdona
La traición de Juan Carlos que Sofía no perdona
> Doña Sofía nunca ha sido ajena a las aventuras de don Juan Carlos. Siempre intentaba enterarse de todo a través de personas de Zarzuela de su confianza. Después, cuando el rey llegaba a casa, estallaban las broncas. Peleas muy sonadas donde algunos objetos acababan estrellados contra el suelo. Con los años, la reina aceptó que su marido nunca cambiaría y que tendría que convivir con la sombra de otras mujeres.
Si hay algo que doña Sofía no perdona es la deslealtad. En este sentido, tiene mucho que reprocharle a su marido. En alguna ocasión, don Juan Carlos se ha desahogado sobre doña Sofía con alguna de sus amigas especiales. Sin duda, esto ha significado toda una puñalada para la reina. De hecho, las palabras del rey fueron grabadas y el testimonio que ofrece sobre su esposa es demoledor. Durante años se pagó mucho dinero para evitar que ese material saliera a la luz. El problema es que son varias las mujeres que han sido depositarias de los secretos del rey y quién sabe si alguna de ella se atreverá a hacerlos públicos.
.
