Están empeñados en separarles, pero María José Campanario y Jesulín de Ubrique siguen dispuestos a sonrojar a sus enemigos públicos. A pesar de que Kiko Hernández y Belén Esteban siguen sosteniendo que el matrimonio del torero y la odontologa es una estafa, las cosas han cambiado y María José les ha propinado un guantazo sin mano que suena a venganza.
Anunciaron su separación
> Desde que María José Campanario apareció en la vida de Jesulín de Ubrique cuando éste se debatía entre la vida y la muerte tras un grave accidente, fueron muchos los que la criticaron. Vieron en la de Castellón a una joven que tenía ganas de aprovecharse de la fama del torero. Pasaron los años, la boda, los nacimientos de sus dos hijos y, aún así, las voces más críticas se unían para malmeter contra la ahora odontologa. Un sector de la prensa se ha afanado en asegurar, de forma reiterada, que la relación hacía aguas.
Tanto es así que hace unas semanas, el programa Sálvame aseguraba que el matrimonio había llegado a su fin. Anunciaron, incluso, que Jesulín de Ubrique iba a anunciar en rueda de prensa que había decidido emprender el camino de la separación. Fue entonces cuando Kiko Hernández y Belén Esteban, más unidos que nunca, refrendaron una información que acabó siendo falsa. No hubo anuncio, ni separación.
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Se acabaron los rumores
> El programa Sálvame, que había confirmado la separación matrimonial, excusó el error asegurando que la pareja había decidido no seguir con sus planes porque ellos los habían destapado. Durante los días posteriores, otros colaboradores del programa como Gustavo González insistieron en que la crisis era evidente y la separación un hecho incuestionable. Hablaron, incluso, de que el matrimonio hacía vida por separado. Pero la realidad nada tiene que ver con lo explicado. Tanto es así, que María José Campanario ha decidido dar un guantazo sin mano a todos aquellos que se han atrevido a cuestionar su relación sentimental.
Así las cosas, la de Castellón acudió este fin de semana a Morón de la Frontera donde Jesulín de Ubrique reaparecía en una corrida brillante. Aunque no es habitual verla en las plazas de toros, María José quiso acudir al ruedo para ver a su marido y desmontar, de una vez por todas, las informaciones que reescriben su realidad. Ni crisis, ni separación, ni ruptura ni tragedia. Esta aparición es el preludio a lo que sucederá en las próximas semanas: Campanario prepara su regreso.
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Una exclusiva muy pronto
> Estaba previsto que María José Campanario concediera una entrevista durante el mes de marzo tal y como aseguró el periodista Jesús Manuel Ruiz en el programa Estando Contigo de la autonómica manchega, coincidiendo con el final de la guerra judicial que inició contra algunos periodistas y medios de comunicación. Aunque está dispuesta a contarlo todo a través de una exclusiva, de momento se desconoce cuándo se producirá su esperada rentrée mediática. Al parecer, María José tiene, incluso, la autorización y beneplácito de su abogado, quien le ha aconsejado que, pasado el temporal, lo mejor será que hable y se desquite.
En la entrevista, tal y como está planteada, Campanario abordará todas las polémicas. Desde la famosa caja de zapatos en la que, al parecer, guardaba recortes de Belén Esteban hasta los motivos de su último ingreso hospitalario. Lo que está claro es que está pletórica. Y no es para menos, porque ha vencido a Kiko Hernández en los tribunales. Y de qué manera.
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Condenado a indemnizarla
> Está claro que a Kiko Hernández la última condena recibida no le ha sentado bien. Quizás por eso quiso desdibujar la realidad en el programa en el que colabora. María José Campanario ha salido victoriosa de la guerra judicial que les enfrentaba desde que el polemista desveló, sin su autorización, la enfermedad que sufría. La mujer de Jesulín de Ubrique consideró que las palabras de Kiko Hernández suponían una intromisión en su derecho al honor. Y así lo entendió la Audiencia Provincial de Madrid que, finalmente, acabó condenando al colaborador a indemnizar a María José con una cantidad simbólica de 2.000 euros.
A pesar de que Kiko aseguró que María José tendría que pagarle más dinero porque en primera instancia le absolvieron e impusieron el pago de las costas a la parte demandante, esto no es real. En el fallo de la Audiencia Provincial se especifica que cada parte debe correr con los gastos derivados de su defensa. Pero Kiko Hernández no ha sido el único de los colaboradores de Sálvame condenados. María Patiño también tendrá que indemnizar a Campanario por injuriarla y calumniarla gravemente.
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Condenada por injurias y calumnias
> La guerra entre María Patiño y María José Campanario se remonta a la década de los 2000 cuando la periodista anunció la primera ruptura entre el matrimonio. Patiño ha sido, sin duda alguna, la voz más crítica y la que más veces ha anunciado una ruptura sentimental que nunca ha llegado. Pero llegó mucho más lejos. Fue en 2013 cuando María, en un arranque sin precedentes en Sálvame Deluxe, aseguró que, en una discusión, María José Campanario agarró por el cuello a la madre del diestro, Carmen Bazán.
La acusación, que fue desmentida en el mismo momento, provocó que la colaboradora se reafirmara consciente de que acabaría siendo juzgada. Tal vez pensó que Carmen Bazán, protagonista de la historia, confirmaría los hechos en el juzgado. No fue así. Tanto María José como Carmen aseguraron que Patiño se había inventado lo explicado. La periodista quedó desmontada ipsofacto con la consiguiente condena, que le obliga a abonar 50.000 euros a María José, por injurias, calumnias e intromisión al honor. No todo vale, está claro.