No suele hablar. De hecho, hace mucho tiempo que no conocíamos su punto de vista sobre los asuntos que trascienden de la vida familiar de Jaime de Marichalar. Harto de los comentarios acerca de sus hijos, el ex Duque de Lugo ha roto su silencio y ha dejado más de un recadito para los que le han cuestionado constantemente. Y para Letizia Ortiz, una indirecta muy sorprendente.
Froilán y Victoria Federica, en el punto de mira
> No hay semana en la que los hijos de Jaime de Marichalar y la Infanta Elena no ocupen titulares de prensa. El comportamiento rebelde de Froilán -al que su familia llama Felipe- y la presencia de éste en la manifestación organizada por VOX, PP y Ciudadanos en Colón hizo correr ríos de tinta. Por su parte, a Victoria Federica también se le ha señalado por acudir, al parecer, a la fiesta que VOX organizó en el Teatro Barceló. Aquel hecho, que puso en jaque a la monarquía española, copó gran parte de los medios de comunicación. De hecho, se llegó a asegurar que Casa Real había dado un toque directo a los sobrinos del rey Felipe y de Letizia Ortiz.
Pero, ¿qué hay de cierto en todo lo publicado? Jaime de Marichalar ha roto su silencio, ha hablado alto y claro sobre sus hijos y manda una indirecta, indiscutible, a su ex cuñada Letizia.
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Marichalar, desmiente todas polémicas
> Según ha declarado Jaime de Marichalar a la periodista Carmen Duerto para La Razón, nada de lo que se ha publicado sobre sus hijos corresponde con la realidad. En concreto, el ex de la Infanta Elena ha querido desmentir que, por ejemplo, su hija Victoria Federica hubiera repetido curso escolar -como aseguró El Mundo- o que, incluso, la joven esté manteniendo relación sentimental alguna con Gonzalo Caballero, con el que sí ha tenido un escarceo o romance: «Mi hija me dice que no tiene novio, que no está saliendo con el torero y yo la creo. Mi hija sale y se divierte pero ella es más lista, es mujer y es más lista y no se la ve tanto como a su hermano». También ha querido negar que Victoria Federica estuviera en el acto de VOX como se ha publicado.
Y es que, según Marichalar, es innegable que su hija estuvo en Barceló el día en que se celebró el mitin de Santiago Abascal, pero por pura coincidencia: «Coincidió que ella estaba en otra parte del teatro Barceló en la puesta de largo de una amiga, pero ni bajó al mitin, ni estuvo en él. De mis hijos se inventa casi todo».
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Froilán, su ojito derecho
> Renglón aparte merecen las informaciones que sitúan a Froilán en una ideología de extrema derecha. Son muchos los que han publicado que, incluso, podría estar afiliado a VOX. Marichalar aprovecha la conversación con Carmen Duerto para aclarar que esto es un invento: «Mis hijos no están afiliados a ningún partido político». Como un padre entregado y orgulloso de sus hijos, Jaime no ha dudado en romper una lanza en favor de Froilán: «Está sacando su curso, está muy centrado y le va muy bien su carrera. Es cierto que la diferencia con su hermana Federica es que es más movido, más gamberrete. Y gracias a Dios que es así».
Para Jaime está claro que sus dos hijos son diferentes. Y para muestra, la comparación que hace con las respectivas familias. De su hijo asegura que es «igual que la Infanta», mientras que de Froilán asegura que «se parece más a mi familia». Pero lo sorprendente es la reflexión que hace sobre su hijo y que, sin duda, supone un desafío a la reina Letizia. ¿Es una indirecta muy directa?
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La indirecta a doña Letizia
> Durante la conversación que Carmen Duerto mantiene con Jaime de Marichalar y que publica La Razón, también hay lugar para las indirectas. Aunque Jaime, siempre elegante y cortés, lo hace de una forma muy sibilina, está claro que aprovecha la ocasión para lanzar un dardo envenenado a doña Letizia. Lo hace al hablar del comportamiento de su hijo Froilán y de sus habilidades para el estudio. Una actitud que contrasta mucho con las de las hijas, Sofía y Leonor, de doña Letizia y el rey Felipe: «A mi no me hubiese gustado que Felipe fuese el empollón y el típico que siempre levanta la mano porque se lo sabe todo. Yo prefiero que sea así como es, un buen chico, espabilado y que disfruta».
De sobras es conocida la fama que las hijas de doña Letizia y el rey Felipe tienen en el ámbito escolar. ¿Qué ha pretendido insinuar Jaime de Marichalar con estas declaraciones?
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Marichalar ni olvida ni perdona a Letizia
> Jaime de Marichalar fue uno de los más críticos con Letizia Ortiz cuando arribó a Zarzuela. El marido de la infanta Elena consideraba entonces que don Felipe se había equivocado en su decisión sentimental. Para él, hombre muy arraigo en las antiguas tradiciones monárquicas, la futura reina no debía de tener pasado. En el caso de Letizia, lo tenía y para Jaime era excesivo. Que hubiera estado casada y posteriormente se divorciara era algo que no entraba dentro de sus cánones. Por tanto, se dedicó a criticarla ante quien quisiera escucharle.
La asistencia de don Felipe y doña Letizia a la boda de Federico de Dinamarca y Mary Donaldson dio mucho que hablar por el vestuario escogido por Letizia. A Jaime le pareció un horror que se pusiera aquel famoso vestido rojo que, según él, era más propio de una starlette de Hollywood que de una princesa. Hubo tanta movida que esto dio origen a una fuerte discusión entre Henar Ortiz y el entonces duque de Lugo.
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Las vueltas que da la vida
> Nadie sabe qué ocurrió pero el caso es que algo sucedió que hizo que Jaime mirara con otros ojos a Letizia. Al parecer, cuando la vio destrozada por el fallecimiento de su hermana Érika, Marichalar aparcó todos los recelos que albergaba hacia a ella y le tendió la mano. Recordemos que doña Letizia estaba embarazada cuando el triste hecho sucedió y muchos temieron que no llegara a buen puerto la gestación debido a la gran pena que arrastraba.
A partir de ese momento se creó un fuerte vínculo entre ellos. La reina le apoyó a él cuando falleció su madre. No dudó en posicionarse a su lado cuando llegó la separación de Elena. Se les captó juntos saliendo de un restaurante. Esto hizo que la infanta le hiciera la cruz y la raya a su cuñada. Además, la reina se ganó una buena reprimenda por parte de don Felipe por apoyar públicamente a Jaime en detrimento de Elena. Esto marcó un antes y un después. Doña Letizia tuvo que soltar la mano de Jaime y otra vez se instaló un muro de silencio entre ambos.
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