No cesa en su empeño de mantener el optimismo pase lo que pase, pero lo cierto es que el destino se lo está poniendo muy difícil a Terelu Campos. A las graves complicaciones de su doble mastectomía, por la que tendrá que pasar por quirófano nuevamente, se suma la muerte de su tío Manolo. Lo que no podía imaginar nunca la presentadora es que serían su madre y su hija las encargadas de hacer que termine de hundirse.
Los sinsabores de Terelu
> Resurge constantemente de sus cenizas y no pierde la sonrisa, pero Terelu Campos nunca volverá a ser la misma. Lleva una temporada muy complicada en la que no para de enlazar desgracias. El pasado julio su mundo se desmoronó al ser diagnosticada de cáncer de mama. Es la segunda vez que hace frente a esta enfermedad y sabe muy bien todos los sinsabores que esto conlleva. La historia se repetía, y ahora con fatales consecuencias.
A pesar de que el tumor era pequeño y estaba muy localizado, la hija mayor de María Teresa Campos ha vivido una verdadera pesadilla. Decidía, con el apoyo de sus oncólogos de la Fundación Jiménez Díaz, someterse a una doble mastectomía, la solución para despedirse para siempre del cáncer. Lo que no imaginaba es el altísimo precio que tendría que pagar por esta despedida definitiva. Dos intervenciones quirúrgicas, dolores constantes… «Ha sido un infierno oscuro que daba miedo”, aseguraba.
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Los mazazos que no esperaba
> En estas primeras semanas de 2019 parecía que la presentadora empezaba a ver la luz al final del túnel. Ha regresado al trabajo y dice encontrarse mucho más animada. Eso sí, tendrá que volver a someterse a una operación por tercera vez, algo que le produce una gran intranquilidad. Tiene pánico a revivir el horror. «Psicológicamente ha sido demoledor. Las heridas interiores son más dolorosas que las exteriores», reconocía.
Por si esto fuera poco, el destino ha vuelto a burlarse de ella. En medio de esta convulsa etapa la vida le ha quitado a una de las personas que más quería: su tío Manolo. Era el único hermano de su padre y, aunque en la sombra, siempre estuvo muy pendiente de sus sobrinas. Además, Terelu lo eligió como padrino en su boda con el hombre que más le ha marcado, Alejandro Rubio. A pesar de que llevaba un tiempo enfermo, nadie imaginaba que el repentino desenlace. Y mucho menos la sorpresa que esta pérdida traería.
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Su círculo de confianza se deteriora
> Tocada y hundida, así está Terelu. Y es que la gota que ha colmado el vaso es que ha sucedido un grave suceso que ha terminado por minar sus fuerzas y su vitalidad. La andaluza ha sufrido una gran deslealtad por parte de dos de las personas más importantes de su vida. Dos de sus pilares básicos. Esos en los que siempre se ha refugiado para salir adelante y resurgir como el Ave Fénix.
Este golpe bajo ha pillado a la colaboradora de Sálvame totalmente despistada. No esperaba que su circulo de confianza le diera esta puñalada. Los que la quieren y conviven a diario con ella saben que lo último que necesita en este periodo son disgustos. Las cosas negativas ahora le afectan más que antes y ralentizan una recuperación rápida y exitosa, que es su deseo.
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Dos dolorosas puñaladas
> Quién le iba a decir a Terelu que su madre, María Teresa Campos, y su hija, Alejandra, la iban a fallar justo ahora, cuando más las necesitaba. Ambas la han dejado sola en uno de sus días más difíciles: el de la despedida de su tío Manolo. Ninguna de las dos hizo a su lado el difícil viaje a Santander, la ciudad en la que se le dio el último adiós. Quienes sí se desplazaron hasta Cantabria fueron José Carlos Bernal, Carmen Borrego y la hija de esta, Carmen Rosa Almoguerra.
Terelu no pudo contener la emoción en esta difícil despedida donde recibió, por sorpresa, el consuelo de José Campos, íntimo amigo de los Borrego. El empresario vuelve a saltar así al papel couché en el que tantos titulares ocupó gracias a su matrimonio con Carmen Martínez-Bordiú. Desde 2014, cuando se casó nuevamente, mantiene su vida alejada del foco mediático.
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El negocio del cáncer, en cifras
> Terelu intenta sin éxito levantar la cabeza. Además, el público ya no la quiere como antes. Son muchos los que la acusan de haberse lucrado de una enfermedad tan terrible como el cáncer. La gente que atraviesa o ha atravesado ese trance critican su frivolidad. Creen que su testimonio no tiene la finalidad de ayudar a lo demás sino que quiere mejorar la situación de su cuenta corriente.
Entre las exclusivas concedidas a las revistas y las diversas entrevistas realizadas en el plató de Sálvame, su programa, la ex de Pipi Estrada podría haberse embolsado la suculenta cifra de 200.000 euros. Además, su hermana, Carmen Borrego, también ha tenido importantes ingresos hablando de Terelu. Un negocio redondo para una familia sobre la que planea la sombra de las deudas.