Belén Esteban nunca pasa de moda, como las bodas. Con ella no hay punto intermedio: o la quieres o la detestas. Tras casi veinte años en televisión, sigue siendo una de las protagonistas de Sálvame y también de los titulares de la prensa del corazón.
Una conocida página de peticiones sociales, Change.org, ha hecho pública un llamamiento en contra de la colaboradora para que esta abandone la televisión.
Miles de firmas en contra de Belén Esteban
Ella siempre lo ha mantenido: «No puedo gustarle a todo el mundo… hay gente que me quiere y hay gente que me odia. Así es, Belén. Hay gente que, no sabemos si te odia, o no, pero parece que no quiere que sigas trabajando en televisión. Sabemos lo que dirías ante esta afirmación: «mi continuidad en el programa dependerá de mis directores y yo estaré aquí hasta que lo decida el público». Previsible.
Parte de ese público parece estar ya cansado de ver cada tarde a la de Paracuellos en Sálvame. La nueva sección de la colaboradora, en la que entrevistará a numerosos rostros conocidos de nuestro país, podría haber sido el detonante para que la usuaria de Change.org Alicia Carmona, haya decidido poner una queja dirigida directamente a Mediaset.
Casi 5.300 firmas en muy poco tiempo. Un mensaje claro y sin rodeos por parte de la persona que ha escrito esta petición contra Belén: «Somos muchas las personas que nos sentimos ofendidos por este personaje televisivo, que lo único que ha hecho en su vida ha sido tener un hijo con un torero y así convertirlo en su negocio. Es chabacana, maleducada e inculta y se vanagloria de ello, no aportando nada a la sociedad» a lo que finalmente añade: «Por ello pedimos que desaparezca de la Televisión ya que su conducta es totalmente inadecuada no sabiendo realizar su trabajo y siendo un ejemplo totalmente inapropiado y perjudicial para nuestros jóvenes».
En algunas ocasiones muchos hablan de Belén Esteban como un «juguete roto», ya que, quizá, no proporciona las audiencias con las que temblaban los audímetros hace años. El hecho es que sigue ahí cada tarde, reinventándose o reinventándola. No sabemos hasta cuándo ni cómo será su futuro televisivo. Eso lo decidirá el tiempo.