Tiene la sonrisa como su corazón: amplia, dulce y generosa. La Peña Periodística Primera Plana ha querido premiar con el galardón a la comunicación a María Casado. Se trata de un premio, otorgado anualmente en la entrega de los Premios Naranja y Limón, que ya tienen Maria Teresa Campos o Lola Flores.
Un reconocimiento a su impecable trayectoria profesional que arrancó en la radio catalana y no parece tener techo. Tras brillar en los Informativos de TVE, moderar debates políticos y sacudir a los espectadores con la cobertura de los atentados de Barcelona, María se encuentra en un momento dulce. Brilla con especial luz en La Mañana de TVE que la castellonense Pilar Cerisuelo dirige con trabajado éxito en la televisión estatal. Esfuerzo y dedicación que se ven reflejados en las audiencias: desde su desembarco, el programa acumula los mejores resultados de los últimos años.
Un merecido premio dedicado a su madre
Casado, acompañada por Jota Abril y Fernando de la Guardia, ha encontrado la fórmula perfecta para ser creíble entre sucesos, política y crónica social. No necesita coronas para ser la reina. Tal vez por eso logra acariciar a la audiencia con las palabras. Nunca desentona con comentario alguno y es capaz de emocionar incluso ante lo más liviano. Por eso no es de extrañar que se la rifen para entregarle premios. Este, sin duda, es uno de los más especiales. Un aplauso de la prensa para una periodista incapaz de descansar y que, emocionada, dedicó unas sentidas palabras a sus compañeros y a su madre, Ana. Por muchos más, amiga.