El regreso de ‘El Hormiguero’ este 2 de septiembre fue explosivo. Tras varios meses de descanso estival, el programa volvió con una mezcla de invitados de lujo, nuevas secciones y colaboraciones, pero lo que realmente capturó la atención de la audiencia fue la tertulia de los jueves, donde Tamara Falcó, Nuria Roca, Juan del Val y Cristina Pardo volvieron a sus habituales discusiones. Sin embargo, fue Tamara Falcó quien, con sus revelaciones sobre su vida personal, se llevó todos los titulares.
Durante la conversación, Pablo Motos mencionó una anécdota sobre una mujer que animaba a su marido a gritos durante los entrenamientos. A partir de ahí, Tamara Falcó no dudó en compartir algunas tensiones con Íñigo Onieva relacionadas con su rutina deportiva. “Yo no motivo así. Yo quiero que me motiven”, expresó con firmeza, confesando su frustración cuando su marido intenta corregirla durante las sesiones de ejercicio. Esta revelación provocó risas entre sus compañeros, pero también dejó entrever un aspecto desconocido de su relación.
Tamara Falcó narró cómo su relación con Onieva passa por pequeñas fricciones cotidianas, particularmente durante los entrenamientos. La marquesa de Griñón confesó que, en más de una ocasión, su esposo ha tratado de corregir su técnica durante el ejercicio, lo que le ha generado incomodidad. “A veces voy a entrenar con el entrenador de Íñigo y él me corrige. Me dice cómo hacer las sentadillas”, contó Tamara, visiblemente molesta. Para ella, este tipo de actitudes no son motivo de motivación, sino de tensión.
El conflicto no termina en el gimnasio. Tamara también explicó cómo sus paseos juntos se convierten en una fuente de desencuentros. Mientras ella prefiere caminar de forma relajada, disfrutando de la naturaleza, su marido tiene una visión más intensa y deportiva de la actividad. “Yo cuando voy a pasear, quiero mirar los árboles, los pájaros. Y resulta que él va a entrenar”, comentó con una sonrisa, pero dejando claro que esas diferencias marcan sus rutinas diarias.
La conversación en ‘El Hormiguero’ no se limitó solo a cuestiones deportivas. El tema de las vacaciones y si las parejas deberían pasar tiempo separadas también estuvo sobre la mesa. Mientras Nuria Roca y Juan del Val confesaron haber pasado días separados durante las vacaciones, Tamara fue más cautelosa. A pesar de que ha pasado gran parte del verano viajando por el mundo con Íñigo Onieva, la marquesa no fue capaz de definir si le gustaría pasar tiempo alejada de su esposo.
«Yo creo que depende», reflexionó. Tamara argumentó su respuesta poniendo como ejemplo la relación de su hermana Ana Boyer y su marido Fernando Verdasco, quienes, según ella, no se separan durante las vacaciones y les va «fenomenal». Esta reflexión abrió un espacio de debate sobre los diferentes modelos de pareja y cómo cada uno encuentra su propio equilibrio, lo que permitió vislumbrar que Tamara aún está buscando el suyo junto a Onieva.
A pesar de estas pequeñas fricciones en la rutina diaria, no se puede negar que Tamara Falcó e Íñigo Onieva han disfrutado de un verano de lujo. La pareja compartió con sus seguidores en redes sociales un álbum de fotos de sus idílicas vacaciones en las Maldivas. Desde playas de aguas cristalinas hasta alojamientos exclusivos, la escapada ofreció un respiro necesario para la marquesa tras un año cargado de estrés mediático.
Lo que más sorprendió a sus seguidores fueron las imágenes submarinas que compartieron, donde se les veía practicando submarinismo y rodeados de fauna marina espectacular. Peces tropicales, una mantarraya gigante, e incluso un tiburón, fueron algunos de los compañeros de buceo de la pareja, demostrando que, más allá de las tensiones cotidianas, saben disfrutar juntos de aventuras emocionantes.
La vuelta a la vida cotidiana no ha sido fácil para Tamara Falcó. Tras semanas de desconexión en las Maldivas, donde el lema de su esposo era «Cero estrés», la marquesa se enfrenta ahora a las demandas de su vida pública y a la reciente pérdida de Caritina Goyanes, una amiga cercana. Este contexto ha hecho que su regreso al trabajo y a su vida en Madrid sea más difícil de lo que esperaba.
Tamara Falcó en El Hormiguero
En ‘El Hormiguero’, Tamara Falcó mostró su lado más personal y vulnerable, compartiendo detalles de su vida con Íñigo Onieva que muchos no conocían. Aunque la pareja ha mostrado una imagen idílica en redes sociales, con fotos de ensueño y viajes inolvidables, la realidad es que, como cualquier relación, también tienen sus momentos de fricción. El público, siempre ávido de detalles sobre la vida de los famosos, quedó cautivado por estas revelaciones, demostrando una vez más el poder de la televisión para conectar con la audiencia a través de las emociones y los momentos íntimos de sus protagonistas.
No cabe duda de que Tamara Falcó sigue siendo una de las figuras más mediáticas de la televisión española. Sus confesiones en ‘El Hormiguero’ han abierto una ventana a su vida privada que, hasta ahora, había permanecido cuidadosamente reservada. ¿Será esta la primera de muchas revelaciones sobre su relación con Íñigo Onieva? Solo el tiempo lo dirá. Lo que es seguro es que el programa de Pablo Motos seguirá siendo el escenario donde las estrellas, como Tamara, se muestran tal como son, con sus luces y sus sombras.