El conflicto estalla en la exclusiva urbanización Jardines del Siglo XXI de Boadilla del Monte, donde los vecinos se ven envueltos en una disputa económica que recuerda a los dramas televisivos. En el centro de la controversia se encuentra Iker Casillas, exfutbolista y una de las figuras más conocidas de la comunidad, quien, a pesar de atravesar un momento personal complicado debido a la reciente ruptura de su exesposa, Sara Carbonero, no puede evitar verse afectado por el escándalo.
A Iker Casillas, quien posee varias propiedades en la urbanización, la disputa no le quita el sueño, pero la situación es innegablemente compleja. La raíz del conflicto está en la urgente necesidad de realizar obras para evitar el desprendimiento de cornisas, un problema que ha puesto en alerta tanto a los vecinos como al Ayuntamiento de Boadilla del Monte. Este último ha advertido a la comunidad de propietarios que, de no llevarse a cabo las reformas necesarias por iniciativa propia, el consistorio intervendrá, y los costes serán asumidos por los vecinos.
El inicio del enfrentamiento se remonta a la denuncia de un vecino, quien, preocupado por el estado de las cornisas, presentó un informe técnico elaborado por un arquitecto. Este documento revelaba la existencia de grietas significativas en el interior de algunos inmuebles, lo que podría representar un peligro inminente. Según fuentes de Infobae, la derrama por propietario oscila entre 14.000 y 16.000 euros, una cifra que ha desatado una auténtica guerra entre los residentes, muchos de los cuales como Iker Casillas se muestran reacios a asumir semejante gasto.
A pesar de las advertencias y la necesidad evidente de las reformas, la comunidad de vecinos sigue dividida. Hasta la fecha, se han solicitado más de 20 presupuestos a distintas empresas constructoras, pero las obras aún no han comenzado. Durante la última reunión de propietarios, quedó patente la voluntad general de llevar a cabo las obras, pero las discrepancias sobre cómo proceder han paralizado el proceso. Mientras que algunos vecinos prefieren realizar todas las reformas de una vez, otros proponen hacerlo de manera gradual. Además, tres propietarios han contratado abogados y amenazan con demandar a la comunidad si no se aprueban las obras en su totalidad.
En marzo, se llevó a cabo una votación para aprobar los trabajos necesarios, pero el resultado fue un empate técnico: 45 votos en contra y 36 a favor. Este estancamiento ha exacerbado las tensiones en la comunidad, donde las reformas son cada vez más urgentes. Con precios de las viviendas que rondan los 700 mil euros, la situación está lejos de resolverse, y los vecinos, incluida la estrella del fútbol Iker Casillas, se encuentran atrapados en un lío monumental.
La intervención del Ayuntamiento de Boadilla del Monte ha añadido una capa más de complejidad al conflicto. Desde el área de Urbanismo, se ha señalado que las patologías detectadas en algunas zonas de la fachada y las albardillas de la urbanización son graves y requieren un informe de evaluación de edificios (IEE). Sin embargo, la comunidad de propietarios aún no ha presentado dicho informe, lo que ha llevado al consistorio a advertir que, de no cumplirse con este requisito, procederán a ejecutar las obras de manera subsidiaria y repercutirán los costes a los vecinos.
La gravedad de la situación de Iker Casillas
El portavoz municipal subrayó la gravedad de la situación, indicando que la falta de acción por parte de la comunidad podría derivar en la intervención directa del Ayuntamiento, lo que implicaría no solo la ejecución de las obras, sino también la imposición de los gastos a los propietarios. Este escenario ha generado aún más tensión en una comunidad ya de por sí enfrentada, donde las disputas parecen no tener fin.
Lo que comenzó como una simple preocupación por el estado de las cornisas ha escalado a un conflicto de grandes proporciones en la urbanización Jardines del Siglo XXI. Con vecinos divididos, amenazas de demandas y la posible intervención del Ayuntamiento, la situación es un reflejo de las dificultades de la vida en comunidad, incluso en las zonas más exclusivas. Mientras tanto, Iker Casillas, el vecino más famoso, observa desde la primera fila cómo el drama se desarrolla, aunque su atención también está dividida por los asuntos personales que sigue enfrentando.