Tamara Falcó sorprendida por el detalle de su pareja
Tamara Falcó ha protagonizado un momento icónico al mostrarse sorprendida por el bonito detalle que tuvo con ella su pareja Íñigo Onieva. La parejita está disfrutando de unos días en París y ella ha compartido con su audiencia el bonito detalle que ha tenido Iñigo en el día de su aniversario. Al despertarse, la hija de Isabel Preysler se ha encontrado con una sorpresa impresionante.
Su marido le ha preparado una sorpresa muy especial para celebrar el aniversario en la capital francesa. Hemos podido ver la reacción de Tamara Falcó en un vídeo que se ha hecho viral. En él vemos la cara de alucinada de la influencer, a un año de la boda más esperada de España que se finiquitó con una luna de miel de la que todavía se habla. Y la pareja sigue celebrando, tal como hemos podido ver en el vídeo.
La celebración del primer aniversario
Tamara Falcó e Íñigo Onieva viven celebrándose mutuamente. Tienen una vida en constante movimiento: el baile, los viajes, la bebida no se detienen. Y cada tanto aparentan que además de llevar una buena vida también trabajan. Pero ahora no toca trabajar sino celebrar el aniversario.
A un año del enlace Íñigo Onieva ha preparado una celebración muy especial, quizá para dejar atrás sus infidelidades que han rondado siempre la biografía de la dupla. El marido tenía reservada una cena romántica en el sofisticado restaurante Le Voltaire, cosa que entusiasmó mucho a la hija de la Preysler, que no dudó en compartir su ilusión con un mensaje y un montón de fotos del día tan especial que vivieron. Evidentemente, la hija de Isabel Preysler quería un cuento de hadas y lo ha conseguido.
El mensaje de Tamara Falcó
«HOY cumplimos nuestro primer año como marido y mujer. Me llena el corazón de felicidad ver cómo hemos ido construyendo nuestro hogar juntos. Te quiero mucho, mi amor. Por muchos años más brindando juntos», escribió Tamara Falcó en sus redes. En las fotos se la ve la cena romántica en el sofisticado restaurante Le Voltaire, desayunos contemplando la Torre Eiffel y otra serie de símbolos de ostentación.
El viaje se ha completado con fabulosos paseos en la ciudad del amor, cenas en restaurantes de lujo y un hotel tremendamente caro para disfrutar de estos días: Le Bristol París, donde las habitaciones no bajan de los 2000 euros la noche. Pero seguramente lo más llamativo fue el gesto de Íñigo Onieva: un ramo de 12 rosas, una para cada mes desde el día de la boda. Las imágenes se han hecho virales. Tamara se despierta de su cama de lujo y dice: «¡Amor, son las rosas más grandes que he visto en mi vida!»