Anabel Pantoja sigue siendo uno de los nombres propios de la actualidad. Su embarazo ha hecho resurgir muchas polémicas del pasado. Ahora, su relación con Omar Sánchez vuelve a ser relevante, al comprobar las grandes diferencias entre esta historia de amor y la que mantiene en la actualidad con David Rodríguez. Uno de los puntos de inflexión de la pareja fue la mediática boda que celebraron a finales de 2021 y que supuso el principio del fin.
La decepción de Omar Sánchez
Desde que se confirmó el embarazo de Anabel Pantoja, Omar Sánchez se ha convertido en uno de los hombres más buscados de la actualidad. La forma en la que veían la paternidad fue uno de los puntos que separó a la pareja. El canario ha hecho balance y no ha tenido reparos en reconocer que está dolido por la forma en la que su exmujer ha avanzado. Además, ha coincidido con la ruptura con la que era su novia, Marina Ruiz, dejándole en una posición muy complicada.
Omar Sánchez ha estado en la última gala de ‘Los vecinos de la casa de al lado’ y ha hecho balance de las últimas novedades de su entorno. El canario ha hablado sobre cómo ha vivido sus rupturas: “Una ha sido pública durante mucho tiempo. Cuando se dejó estaban los periodistas y toda la prensa detrás de nosotros. Eso te afecta. Hay dolor familiar y de uno mismo«. Con el tiempo, ha llegado a sorprendentes conclusiones sobre su boda con Anabel Pantoja: “No me arrepiento de nada en la vida. Son aprendizajes que he vivido. En ese momento, si hubiera sabido lo que sentía, no me habría casado”, es su reflexión final.
El camino de Anabel Pantoja hasta su boda
Fue en mayo de 2019 cuando Omar Sánchez dio el paso de hincar rodilla y pedirle matrimonio a la que se convirtió en su novia un año atrás. El canario aprovechaba una sesión de fotografías de la marca de bañadores de Anabel Pantoja y utilizaba un escenario único en las Islas Canarias para declararse. La influencer reaccionaba con mucha emoción y no dudaba en aceptar la romántica propuesta. En sus redes sociales compartió el vídeo del momento con unas bonitas palabras: “No tengo palabras para ti, mira que soy lista, pero me diste la vuelta”, adelantando a sus seguidores que iba a ser una celebración por todo lo alto.
Desde el primer momento, parecía que la mala suerte estaba invitada también al enlace. La pareja tuvo que retrasar la boda por la pandemia del coronavirus en 2020. Anabel Pantoja vivió el confinamiento desde las Islas Canarias. En esa época se hicieron virales los directos de Instagram que hacía desde el hogar de la pareja. La influencer retransmitía con naturalidad todo lo que ocurría, incluso discusiones con el que era su prometido. Muchos seguidores y programas de televisión ponían en duda si eran tan felices como querían aparentar.
Los problemas antes de la boda
El segundo impedimento por el que tuvieron que retrasar la boda fue la participación de Omar Sánchez en ‘Supervivientes 2021’. A pesar de que en un primer momento el canario quería ser anónimo, se lanzaba a esta aventura que exponía la realidad de la pareja más que nunca. Además, Anabel Pantoja estaba disfrutando de la estancia de su novia en Honduras y hacía su vida con normalidad. Aunque en ese momento no lo admitió, la joven no estaba echándole de menos, siendo ya una gran señal del verdadero estado de la relación.
La peor noticia para Anabel Pantoja llegaba a dos días de la boda. La abuela de la joven falleció. Mucho se habló durante esos días si tenían que cancelar el enlace y respetar el duelo de la familia. En un primer momento, la sobrina de Isabel Pantoja estaba decidida a anularla, pero después de reflexionarlo decidió seguir adelante, ya que el mayor deseo de Doña Ana era que se casara y fuera feliz. Cómo se celebraba en Canarias, tuvieron que trasladarse a Sevilla para despedirse y volver a pocas horas del evento. La influencer recibió tanto críticas como muestras de apoyo.
Cómo llegó la ruptura
La boda se terminó celebrando por todo lo alto. Incluso, fue retransmitida en directo desde ‘Sálvame’ y toda España fue testigo del broche de oro en su relación de amor. Aunque ambos parecían muy ilusionados, los peores presagios se acabaron cumpliendo. Solo cuatro meses después del enlace, Anabel Pantoja se sentaba en su programa para confirmar que Omar Sánchez y ella estaban separados: “Yo no quería seguir engañándole a él ni a mí. Le dije que ya no era un tiempo lo que nos dábamos, que no me notaba igual y le dije que había reflexionado y que no había nada. Le dije que había amor, cariño y afecto pero que no había nada más”. Reconoció que había sido ella quien tuvo la iniciativa y que se casó con un 60% de convencimiento.
Desde que se anunció la ruptura, los protagonistas dejaron claro que había sido iniciativa de Anabel Pantoja y que Omar Sánchez quería continuar con su relación. Durante la participación en ‘Pesadilla en el paraíso’, el canario dio los detalles de cómo vivió este momento tan delicado de su vida: “Me casé enamorado, pero jodido”. Reveló que la influencer no quería cancelar la boda: “Porque estaba todo el mundo invitado”. Incluso, habló de la posibilidad de ser padres: “Yo sí quería, pero si la relación tambalea el último año, ¿te vas a arriesgar?”, unas palabras muy significativas en el momento actual de la joven.