José Ortega Cano ha avivado la especulación sobre un posible retorno a los ruedos al expresar su entusiasmo por la posibilidad de volver a enfrentarse a un toro. Sorprendió a todos estas declaraciones que hizo en un entorno taurino y rodeado de amigos.
La posibilidad de su regreso ha estado en boca de los aficionados desde la temporada taurina del año pasado, cuando se rumoreaba que el diestro de Cartagena podría reaparecer en el festival de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla el 12 de octubre. Sin embargo, tal evento no llegó a materializarse, dejando a los aficionados a la tauromaquia esperando la oportunidad de presenciar una vez más el arte único de Ortega Cano en el ruedo.
Durante una presentación del libro «El Arte del Toreo» de Andrés Amorós, Ortega Cano compartió sus pensamientos sobre el mundo del toreo y su posible regreso, mientras se encontraba en compañía de destacadas personalidades como el propio autor, Federico Jiménez Losantos y el director de El Debate, Bieito Rubido. El matador expresó su alegría por estar rodeado de «grandes aficionados» y aprovechó la ocasión para elogiar el talento emergente en la tauromaquia, especialmente destacando las habilidades del novillero que actualmente apodera, el joven pacense Julio Méndez.
1Ortega Cano apoya a los jóvenes
Ortega Cano no escatimó en elogios hacia Méndez, describiéndolo como un «torero funcional» que, a sus apenas 16 años, ha logrado impresionar en el circuito taurino, ganando recientemente dos importantes certámenes de novilleros sin caballos: el Zapato de Plata y el Kilómetro Cero. Estas victorias, según Ortega Cano, no solo son un testimonio del talento del joven torero, sino que también le proporcionan la inspiración necesaria para considerar un posible regreso a los ruedos. Aunque oficialmente se retiró en agosto de 2017 en San Sebastián de los Reyes, el matador insinuó que aún conserva la pasión y el deseo de competir.
«Soy capaz de seguir toreando algo más porque me parece muy pronto», afirmó Ortega Cano, reflejando su firme convicción de que aún tiene mucho que ofrecer al mundo del toreo. Su amor por la competición y su compromiso con la preservación de la tradición taurina fueron evidentes en sus palabras mientras reiteraba la importancia de mantener viva la Fiesta de los toros. En un momento en el que algunos cuestionan la relevancia y la ética de esta práctica, Ortega Cano defendió apasionadamente su valor cultural y artístico, insistiendo en que la tauromaquia sigue siendo una parte fundamental de la identidad española.
«La Fiesta de los toros tiene que seguir adelante», enfatizó, argumentando que es esencial para el crecimiento y la perpetuación del arte taurino. Observó con optimismo el creciente interés entre la juventud por este antiguo espectáculo y el vibrante ambiente que se experimenta en la plaza de toros de Las Ventas durante los eventos exitosos. Para Ortega Cano, la presencia de la juventud en las corridas de toros es un indicio alentador de que la tradición está lejos de desaparecer, y es un llamado a la acción para proteger y promover este legado cultural.
A medida que la discusión sobre el futuro de la tauromaquia continúa, la posibilidad de un retorno de José Ortega Cano a los ruedos no solo suscita emoción entre los aficionados, sino que también plantea preguntas más amplias sobre la evolución y la relevancia de esta centenaria tradición. Mientras tanto, Ortega Cano sigue siendo una figura emblemática en el mundo del toreo, tanto por sus hazañas pasadas como por su apoyo continuo a los jóvenes talentos que buscan seguir sus pasos en la arena.