A pesar de su regreso a televisión como colaboradora de ‘TardeAR’ -donde tiene su propia sección, en la que por el momento ha probado el buffet más impresionante del mundo-, Anabel Pantoja parece que sigue sin querer saber nada de las cámaras.
Y lo ha vuelto a demostrar una vez más, castigando a los reporteros con el látigo de la indiferencia cuando le hemos preguntado qué hay de cierto en que su tía Isabel Pantoja ha dado un ultimátum a la viuda de su padre, Junko, para que abandone su casa del sevillano barrio de Triana en el que residía junto a Bernardo y que pertenece a la artista.
Según ha revelado el periodista Antonio Rossi en ‘Vamos a ver’, la madre de Kiko Rivera necesita vender ese piso para solucionar sus deudas y habría ofrecido a la japonesa dos posibilidades: o bien irse de allí -dándole un plazo más que razonable para buscarse otra cosa y hacer la mudanza-, o bien comprarlo (aunque se desconoce cuánto dinero le habría pedido).
Una información sobre la que Anabel ha preferido no decir nada, aunque su seriedad y su mala cara al ver a la prensa deja clara su postura. ¡Si las miradas matasen más de uno tendría que temer a la sobrina de la cantante!