Ocho meses después del nacimiento de su hija Philippa, Isabelle Junot y Álvaro Falcó han celebrado el bautizo de la pequeña acompañados por sus familiares y amigos más cercanos. Un día especialmente señalado que tenía lugar este sábado en la madrileña iglesia de San Fermín de los Navarros y al que, como no podía ser de otro modo teniendo en cuenta la maravillosa relación que tiene tanto con su primo como con la hija de Philippe Junot -que es una de sus mejores amigas- no faltaba Tamara Falcó.
Tampoco Íñigo Onieva, aunque la pareja -de lo más esquiva en sus últimas apariciones públicas a pesar de que han dejado claro que nada hay de cierto en los rumores de crisis que surgieron hace varias semanas ya que están en su mejor momento- entró y salió de la iglesia por separado, evitando así quitar el protagonismo a la niña y a sus orgullosos papás, los marqueses de Cuba.
Sin embargo, Tamara sí ha decidido regalarnos un posado con su marido en sus redes sociales presumiendo de lo enamoradísimos que están 8 meses después de su boda. Y en su tierna imagen se ha ‘colado’ una inesperada invitada, ¡la pequeña Philippa! Mientras la marquesa de Griñón -guapísima con un diseño de terciopelo de Ailanto- le da el biberón a la bebé Íñigo posa feliz a su lado. ¡Sus sonrisas lo dicen todo!
Y es que la socialité no ha ocultado en ningún momento sus deseos de ampliar la familia tras darle el ‘sí quiero’ al ingeniero y, aunque confiesa que le encantaría quedarse embarazada, mientras no llega un nuevo miembro a la familia están disfrutando de su recién estrenado matrimonio. Y viéndoles ‘practicar’ con la hija de Álvaro Falcó e Isabelle Junot no podemos negar que nos encantaría verles pronto con su primer hijo en común.