Tras su emocionante proclamación como Rey de Dinamarca este domingo, Federico X ha protagonizado esta mañana su primer acto oficial como monarca. Acompañado por la Reina Mary -con la que ha vuelto a derrochar complicidad después de su beso de película en el balcón del palacio ante el pueblo danés tras la abdicación de la Reina Margarita- y flanqueado por el núcleo duro de la Familia Real, el flamante soberado ha presidido una recepción en el Parlamento Danés con motivo del cambio de trono.
Acompañado por su esposa, su hijo mayor el Príncipe heredero Christian, su madre -la Reina Emérita, que por primera vez ha llegado a un acto antes que su primogénito, último en hacer su aparición siguiendo el protocolo-, su tía la princesa Benedicta -hermana de Margarita-, y por su hermano el Príncipe Joaquín, al que ha abrazado con una gran efusividad, Federico se ha estrenado como Rey en el Folketing.
La Familia Real, con el Rey al frente, ha ocupado uno de los palcos para escuchar los discursos con los que el presidente del Parlamento danés, Soren Gade, y la primera ministra, Mette Frederiksen, han ensalzado el papel de la Reina Margarita en sus 52 años de reinado, y han dado la bienvenida a Federico con varios ‘hurras’ en su honor incluidos.
Un acto muy especial en el que la Reina Mary ha deslumbrado con un elegante total look azul marino con el que ha hecho toda una declaración de intenciones. Y es que a pesar de lo señalado del día, la australiana ha optado por recuperar un conjunto que estrenó hace un año, compuesto por una falda midi de corte evasé y una chaqueta de corte péplum de lo más favorecedora.
Un estilismo que ha completado con stilettos, sombrero con tocado de plumas, guantes de piel y bolso de mano de piel en el mismo tono, logrando un acercatísimo look monocromático en uno de los colores más regios y que mejor sientan a la mujer de Federico de Dinamarca. En este primer compromiso como Reina, Mary también ha querido tener un guiño con la Reina Margarita y ha lucido un impresionante broche de diamantes con un zafiro que su suegra le regaló con motivo del nacimiento del Príncipe Christian en 2005 y que solo ha llevado en ocasiones señaladas. Como esta.