Nuevos detalles de la fiesta de cumpleaños de Juan Carlos I en Abu Dabi han salido a la luz. La celebración de los 86 años del rey emérito reunió a toda clase de invitados y contó con anécdotas curiosas. No faltaron sus hijas mayores acompañados de algunos de sus hijos, como Pablo e Irene Urdangarin o Victoria Federica y Froilán. Precisamente, en una de las fotografías que se han dado a conocer de la fiesta, vemos al rey Juan Carlos y a su nieto mayor cortando con un sable la tarta de la celebración. Un pastel decorado con el escudo de armas y diferentes detalles emblemáticos. En esa misma fotografía, podemos apreciar las caras sonrientes de Victoria Federica, la Infanta Elena y la Infanta Cristina, quienes parecen estar disfrutando de la reunión. La Infanta Cristina aparece con un vestido de la Reina Sofia. Esta fotografía refleja uno de los momentos mas especiales de la fiesta. Al cortar la cobertura de fondant del pastel, se revelaba sobre este una fotografía de Juan Carlos I navegando en el Bribón. Fue ahí cuando la Infanta Cristina cogió de la mano a su padre, emocionado, y comenzaron a cantar el ‘Cumpleaños feliz’ como cierre.
No es la única instantánea que se ha compartido del evento. Otra de las que mas ha llamado la atención es una del Rey emérito, posando con sus hijas y nietos junto a la bandera de España. Esa bandera fue parte de la decoración de la fiesta junto a otros elementos, como un enorme árbol de Navidad desde donde el rey Juan Carlos recibía a los invitados con los brazos abiertos y entusiasmo.
Los invitados más sorprendentes de Don Juan Carlos
Fueron alrededor de cien los invitados que se concentraban en el evento. Esta celebración fue por iniciativa de Pedro Campos, amigo íntimo del rey emérito, quien le ha acogido en algunas de sus visitas a España y su compañero de regatas. Entre los invitados se encontraban otros organizadores del evento, como la mujer de Pedro, Cristina Franze, el abogado Jerónimo Páez o el doctor Eduardo Anitua. Esas personalidades entraban dentro de lo esperado, pero la lista de invitados del cumpleaños de Juan Carlos I es sorprendente. Por ejemplo, llama la atención la presencia de Hugo Arévalo. Este empresario es conocido por su breve romance con Tamara Falcó, previo a la reconciliación con Iñigo Onieva. Hugo era amigo tanto de Tamara como de Iñigo, pero se acercó más a la marquesa de Griñón tras la ruptura de ambos. Este posible romance fue una traición para Iñigo Onieva, quien mandó un amenazante mensaje por un grupo de amigos que se acabó filtrando: “Sucia rata. Te has declarado y has besado a la ex prometida del que se supone que era uno de tus íntimos amigos. Y, para coronarte, lo has hecho a tan solo un mes de dejarlo”. No se conocía que Hugo Arevalo era conocido del rey emérito y su presencia en la fiesta de cumpleaños ha generado mucha curiosidad.
Otra invitada inesperada de la fiesta fue Johanna Zott, la novia de Pablo Urdangarin, lo que demuestra que es una mas en la familia, aunque no participe en el posado principal . La fiesta también contó con actuaciones musicales, como Los del Río. El conocido grupo español llevó algunos de sus grandes temas a Abu Dabi, dándole la nota flamenca.
Celebración sin los Reyes ni la Princesa
Igual de sonadas que los invitados han sido las ausencias. Una de las principales, la de la Reina Sofia, que no estuvo presente en la fiesta. Esto se debe, posiblemente, a que se encuentra en Atenas con motivo del homenaje al rey Constantino, que se celebra en el aniversario de su fallecimiento. Tampoco acudieron dos de los nietos del rey Juan Carlos, Miguel y Juan Urdangarin por motivos laborales.
Las ausencias que no sorprendieron fueron las del Rey Felipe VI y doña Letizia. Ambos estaban presentes, junto a la Princesa Leonor, en la Pascua Militar que se celebró el 6 de enero. Por su parte, la Infanta Sofia ya se encuentra en Gales para continuar su formación de Bachillerato. La coincidencia en las fechas de la Pascua Militar y la fiesta por el 86 cumpleaños del rey Juan Carlos han hecho pensar que el objetivo del emérito es desafiar a su hijo e intentar distraer la atención del momento tan especial entre los Reyes y la Princesa. El entorno de Juan Carlos I ha insistido que eso no es así y que simplemente ha sido una casualidad, sin intenciones ocultas detrás.