Después de su sonada ruptura sentimental con Rauw Alejandro y los rumores que ha habido en las últimas semanas sobre un posible romance con Álex González, Rosalía vuelve a la esfera pública y lo hace por todo lo alto: protagoniza la portada de noviembre de Vogue.
En la tercera portada de su carrera para Vogue España, las fotos de la fotógrafa y estilista neoyorquina Katie Burnett se acompañan de una excepcional entrevista firmada por su amiga Penélope Cruz, en un encuentro que reúne a estas dos grandes mujeres influyentes y artistas españolas en una conversación sincera y llena de admiración mutua.
Durante la conversación, Rosalía y Penélope hablan de cómo se conocieron durante el rodaje de ‘Dolor y Gloria’, y de cómo la artista ayudó a cantar a la actriz abrumada, y exploran los paralelismos que hay entre sus orígenes y carreras, de cómo gestionar la fama, del machismo en las letras del reguetón, y de la -cumplida para una, anhelada para la otra- maternidad.
En cuanto a la fama, la cantante lo tiene claro y «no cambiaría nada, independientemente de que tuviera fama o no». Y es que se siente muy «afortunada de poder hacer lo que hago, así que intento concentrarme en el agradecimiento y en las pequeñas cosas y así no pierdo el norte».
Penélope sin embargo, asegura que su familia «lo que más me ha ayudado a no perder el norte» y abre su corazón contando una anécdota que hasta ahora no conocíamos y que le ocurrió con su padre: «Íbamos los dos caminando por la calle y en cinco minutos una persona pasó con un coche y me gritó: ‘¡Te quiero!’. Y, cinco minutos más tarde, otra persona pasó en otro coche y me insultó. Ahí me di cuenta de que eso era un resumen de lo que iba a ser mi vida a partir de entonces».
La actriz española también ha hablado con Rosalía sobre la maternidad, desvelando que «antes de ser madre yo llevaba un ritmo muy loco y me pasó factura. Y ya tampoco tengo ese tipo de ambición. También es verdad que ahora puedo escoger mis proyectos para no tener que separarme de los niños».
Como nunca antes la hemos visto, Penélope asegura que «desde que nacieron» sus hijos «eso es lo más importante para mí. En realidad todo cambia después de ser madre. Coloca todo el puzzle y ya nunca más te ves a ti mismo como el primero de la la. Y eso es una bendición».
Y… ¡atención! porque Rosalía, que todavía no es madre, no descarta experimentar esta faceta porque piensa que «mejorar la vida de la gente que tienes a tu alrededor y cuidar a los que quieres, en vez de centrarse en uno mismo, es muy bonito» y añade: «Me haría mucha ilusión ser madre algún día».