El seleccionador nacional Luis de la Fuente ha pedido «perdón» por su modo de actuar durante la pasada Asamblea de la RFEF , reconociendo que las críticas que ha recibido «son totalmente merecidas», pero que no debe de «dimitir» por ellas.
El seleccionador ha pedido disculpas por su actitud, afirmando que él pensaba que acudía a un acto de despedida del presidente y que se encontró con una situación para la que no estaba preparado. No ha dudado en explicar que es un hombre de valores, que siempre estará en el lado de la igualdad y del respeto, y afirma que siempre ha tenido a lo largo de su carrera profesional una actitud intachable. Además, reitera su felicitación a las jugadoras y asegura que ni Jennifer Hermoso ni sus compañeras son responsables de lo que sucedió en esa celebración.
«Ante la repercusión social, mediática y política de mis aplausos en la asamblea. Quiero aprovechar para explicar la situación. He recibido duras críticas que creo que son merecidas, lamento y comprendo y pido perdón por ellas. Acudí a la asamblea convencido de que iba a ser el acto de despedida pero se transformó en una situación que nos superó a muchos y pido disculpas. Estos gestos no representan mi forma de pensar y actuar en mi vida. En mis 26 años de entrenador siempre he tenido un comportamiento intachable. Todos recordamos lo ocurrido en Sidney, ni Jenni ni sus compañeras son responsables. Felicito a las jugadoras y al cuerpo técnico. Me gustaría pasar página por este incidente y volver a hablar de fútbol y de los compromisos que tenemos la próxima semana», ha explicado Luis de la Fuente en su discurso.
Cuando le han preguntado si se ha sentido traicionado por Luis Rubiales, ha confesado: «No, no me siento traicionado por Luis Rubiales, pero llegué a esa asamblea pensando que era un acto de dimisión y quedamos en shock cuando vimos que no era así. Nos encontramos con otra cosa totalmente diferente y no fue fácil de dirigir para mí. Quedé en blanco y fue una situación que me superó«.
Ante la pregunta de por qué aplaudió con lo de falso feminismo y por qué en el comunicado no cita a Jenni, asegura: «Estaba implícitamente señalada en el primer comunicado. Yo estoy al lado del respeto. Me gustaría que me cuestionaran por los resultados y no por esta situación de la que no me siento cómodo.
Muchos de la sala se han preguntado por qué aplaudió a las palabras de Rubiales si no estaba de acuerdo, a lo que ha señalado que «fue un error humano en una situación de estrés»: «Es injustificable, trato de explicar el contexto y la situación. Yo lo viví desbordado, no supe estar a la altura y no pude controlar las emociones. No me reconozco en las imágenes».
Sobre la tardanza a la hora de emitir un comunicado, argumenta: «Cuando terminó la asamblea me reuní con el cuerpo técnico hasta altas horas de la madrugada y también el sábado. Yo no me reconocía, fue en ese momento, pero no tengo la capacidad para redactar un comunicado en horas y en ese escenario me sentí incómodo por la seguridad que había que dar al comunicado».
Finalmente, también ha explicado que todavía no ha podido hablar con Jenni debido a su «falta de valor»: «No he contactado con Jenni. Ella no es responsable de lo que está sucediendo. No he hablado con ella, seguramente me haya faltado valor». Además, añade que no se ve en la obligación de dimitir tras lo sucedido: «No tengo que dimitir, tengo que pedir perdón. Cometí un error, un error humano inexcusable. Si pudiera volver atrás no volvería a cometer ese acto. Estoy del lado de la igualdad y del respeto. Todos tenemos que mejorar en materia de igualdad y yo el primero«.