Tras la detención de Daniel Sancho Bronchalo en Tailandia por el presunto asesinato y desmembramiento del cirujano plástico colombiano Edwin Arrieta en la isla de Koh Phangan -un delito que él mismo ha confesado ante las autoridades policiales del país asiático y por el que podría enfrentarse a pena de muerte- todas las miradas están puestas en su familia.
Su padre, el actor Rodolfo Sancho, viajó a Tailandia este fin de semana acompañado por uno de los mejores abogados penalistas en cuestiones de derecho internacional en cuanto se enteró de la complicadísima situación de su hijo para estar a su lado en este durísimo trance e intentar ayudarle en todo lo que esté en su mano -en colaboración con la diplomacia española en el país- y este domingo rompía su silencio a través de un escueto comunicado en el que pedía «máximo respeto» para Daniel y «para toda su familia» en estos «momentos delicados y de máxima confusión».
Sin embargo, su madre, Silvia Bronchalo, guarda silencio y todavía no se ha pronunciado sobre la detención de su hijo y el complicado horizonte judicial que le espera en Tailandia. Poco se sabe de esta mujer que lleva una vida completamente alejada de los focos y que conoció a Rodolfo Sancho cuando ambos tenían 18 años y estudiaban en una escuela de interpretación para cumplir su sueño de triunfar en el mundo del cine.
Muy enamorados, se convirtieron en padres con solo 19 años, cuando el hijo de Sancho Gracia -recordado por su interpretación de Curro Jiménez en la gran pantalla- todavía no había saltado a la fama como uno de los protagonistas de la popular serie ‘Al salir de clase’. La llegada de Daniel supuso un giro radical en la vida de la joven pareja, que poco después rompía su relación.
Silvia decidió alejarse del mundo de la actuación y actualmente se dedica al sector de las aseguradoras, donde trabaja como gestora de patrimonios. Muy discreta, no existen imágenes suyas, no posee redes sociales, no se ha pronunciado públicamente sobre los que están siendo los momentos más complicados de su vida y se desconoce si, al igual que Rodolfo, ha viajado a Tailandia para arropar a Daniel y mostrarle su apoyo tras su detención por el presunto asesinato y descuartizamiento de Edwin Arrieta.