Alejandra Rubio ha roto su silencio en el programa en el que colabora y ha dejado muy claro cuál es el vínculo que le une al futbolista Carlos Aleñá. Su discurso ha sido muy aplaudido e incluso ha recibido la felicitación de Emma García porque ha hablado en un tono contundente y ha dejado claro lo que está pasando en su vida. Alejandra Rubio es uno de los rostros más importantes de la prensa del corazón porque pertenece a una familia muy mediática y porque ha conseguido, gracias a su talento, llamar la atención de los grandes programas de Telecinco. Alejandra está constantemente en el centro de la noticia y lo único que quiere es dejar claro que ella no está detrás de ninguno de los escándalos que rodean su figura pública.
La hija de Terelu Campos ha prometido que en ningún momento se ha planteado ser novia de Carlos Aleñá. No quiere ser la mujer de ningún futbolista y está trabajando muy duro para tener un nombre propio y no depender de la fama de nadie. Sabe muy bien cómo funcionan y cómo trabajan los fotógrafos y por ese motivo era consciente de que le habían fotografiado. Sabía que la historia iba a salir a la luz y por ese motivo ha puesto mucho empeño en dejar claro que ni está enamorada ni quiere ser novia de ningún futbolista. «Este chico no es mi pareja, somos amigos. Estoy en una época en la que no estoy con nadie, hago mi vida, mis estudios y voy a mi bola», ha comentado en Fiesta.
Alejandra Rubio es la única Campos que puede exigir respeto a su vida privada porque en ningún momento ha abierto las puertas de su intimidad y nunca ha concedido entrevistas hablando de sus parejas. Es cierto que trabaja en televisión y que ocasionalmente da pinceladas sobre algunos aspectos de su faceta pública. Por ejemplo, cuando discutió con Carmen Borrego no disimulaba y siempre respondía a las preguntas de sus compañeros para dejar claro que en ningún momento tenía nada que ocultar y que estaba enfadada con su tía por motivos muy serios. En ese sentido sí ha participado del juego, pero nunca ha hablado de su intimidad ni ha ganado más dinero por convertirse en personaje público.
Alejandra Rubio aclara cuál es su situación
>Alejandra Rubio tiene miedo de espantar a todos sus candidatos porque no sería la primera vez que empieza una relación y la tiene que terminar de forma abrupta. La joven pertenece a una familia muy importante y está en el foco mediático de forma continua. Esto ha espantado a su último novio, que también se llamaba Carlos, y quiere impedir que vuelva a suceder lo mismo. Entre otras cosas porque todavía no tiene claro que haya empezado una relación con el futbolista. Especialmente ha insistido en que no quiere depender de ningún escándalo para estar en los medios de comunicación y mucho menos arrimarse a ningún deportista para convertirse en un personaje interesante para los programas de Telecinco.
«Sabía que nos habían hecho las fotos, pero era algo que no sabía nadie. Paso vergüenza, pero sé que me tengo que comer esto», ha comentado delante de Emma García. Le ha explicado a su presentadora que es una persona muy tímida y que por ese motivo nunca quiere hablar de su vida privada. Piensa que lo mejor para pasar inadvertida es no participar en determinados escándalos y eso es justo lo que está haciendo cuando guardas silencio ante determinadas preguntas.
Alejandra puede exigir que sus compañeros no le pregunten sobre este tema porque siempre ha sido muy reservada y en ningún momento ha vendido las relaciones que tenía con sus parejas. Un conocido medio ha asegurado que Alejandra nunca formalizará su relación con el deportista porque no quiere ser la mujer de un deportista y que el público se olvide de su trayectoria o de sus apellidos.
Una delicada situación
>Terelu Campos también dejó claro que su hija no tenía ninguna relación sentimental con el futbolista que se le estaba relacionando. Alejandra Rubio ha continuado con el discurso de su madre y ha explicado que Carlos no se siente cómodo delante de los medios de comunicación y que tampoco quiere mezclarse con determinados escándalos que afecten o puedan afectar a su trayectoria. «Él tiene su trabajo y no sé si esto le va a perjudicar en su carrera. Él no está acostumbrado a lo de verse en una revista», ha comentado la colaboradora.
Alejandra Rubio está cansada de que se le racione con determinados rostros públicos porque en ningún momento ha hablado de sus relaciones sentimentales y no va a romper sus normas. Conoce mejor que nadie cuáles son las consecuencias de vender su vida privada y por ese motivo siempre mantiene la misma postura. No entra en detalles y elige guardar silencio. Alejandra está convencida de que su relación anterior no funcionó por la exposición pública y ahora no quiere cometer los mismos errores, por ese motivo prefiere mirar para otro lado y matizar en todo momento que no está enamorada.