María del Monte sigue siendo la misma de siempre, pero parece toda una nueva mujer. La vida de la coplera ha cambiado en los últimos meses desde que su vida sentimental se hiciera pública y totalmente reivindicativa. En la noche de ayer, la artista se sentaba en Lo de Évole para hablar precisamente de su vida y de la familia que formó hace 23 años y que mantuvo protegida. Pero, además, el periodista ha hecho un retrato hasta ahora desconocido de lo que ha vivido María del Monte con su familia y con Isabel Pantoja. ¡Te contamos todos los detalles!
Ha sido una mujer hermética durante años y el silencio lo ha llevado por bandera. La fuerte amistad que le unió a Isabel Pantoja durante años ha estado en boca de todos y eso hizo, en ocasiones, que María del Monte valiera más por lo que contara que por lo que cantara. No fue un camino fácil para la sevillana, pero nunca lo contó y parece que nunca lo contará del todo. Aun así, Jordi Évole ha conseguido que María del Monte se abra personalmente para hablar, no de cosas bonitas, pero sí de lo que ha marcado a la artista en los últimos tiempos.
María del Monte no vende por dinero a Isabel Pantoja
>María del Monte reconoce que ha perdido mucho dinero por ser amiga de Isabel Pantoja. Jordi Évole hablaba con la artista sobre su relación con la tonadillera, y de estar en boca de todos por su supuesto affaire con la artista de Marinero de Luces. Esa bonita amistad que las unía de pronto cambió, pero María del Monte siempre ha tenido esa sombra en cada entrevista o plató que haya pisado. «Cambió mi tranquilidad. Mi libertad. Cuando se castiga a alguien de lo que se le priva es de libertad. ¿Por qué tenía que tener yo ese castigo si no había hecho nada? Eso lo llevé yo regular», ha confesado al presentador.
María del Monte cada vez más cómoda con Évole, le reconocía que fueron muchas las veces que tuvo ofertas suculentas a cambio de hablar de Isabel Pantoja, pero rechazó todas. «Me han ofrecido dinero muchas veces, pero no. De momento. Mañana tengo que salvarle la vida a alguien y no sé lo que haré. Pero hasta hoy, nadie puede decir que yo haya cobrado dando una exclusiva. He cantado, pero ahí es donde está la madre del cordero. No sabes tú la diferencia de precios. Me llegaron a ofrecer mucho dinero. Hasta 300.000 euros», ha contado en el programa.
Aunque tal cantidad de dinero a veces es tentador, María del Monte reconoce que ha hecho lo correcto en este tama. «Dices, ¿habré hecho bien? Y después dices, he hecho lo mejor que podía hacer. Yo quiero seguir manejando mi vida, y a estas alturas de ella, más», ha explicado a Jordi Évole. Ha reconocido, además, que su inicio de carrera quedó en un segundo plano debido a que Isabel Pantoja dio el gran salto. Aun así, la artista tiene claro que solo fue una decisión de «marketing».
Inmaculada Casal, su mujer y el amor de su vida
>«Quiero que sepáis antes de bajarme de aquí que soy una persona más de los que estamos aquí. Y que, por supuesto, mi pareja está esta tarde aquí. He tenido la suerte de encontrar el amor de mi vida. Tengo familia y llevo 23 años protegiéndola», fueron las palabras que pronunció María del Monte en la celebración del Orgullo LGTBIQ+ de Sevilla hace unos meses. Después de eso, vino una enlace matrimonial rodeadas de muy buenos amigos que vieron cómo una nueva vida pública se abría a María del Monte.
Precisamente, de Inmaculada Casal ha querido hablar Jordi Évole con la protagonista. Y, sobre todo, de cómo fue dar el paso, si sucumbió al peso del silencio. «Yo no he tenido peso nunca, mi círculo íntimo y mi familia siempre ha conocido mi sexualidad. Pero para serte sincera, es verdad que muchas de las personas con las que hemos coincidido después de ese día se han dirigido a ella sabiendo quién es», ha explicado la artista en Lo de Évole.
Presentar a Inmaculada Casal como su mujer ha servido para darle más tranquilidad a su relación: «A lo mejor, nadie se había atrevido a verbalizar nuestra relación. Por ahí, sí noto que la gente está más relajada. Como diciendo que podemos ponerle nombre. Ahora tienen más libertad y eso es maravilloso».
María del Monte sabe que estamos ante una época de cambios y que a sus 60 años puede contarle a todo su público quién es de verdad. Proteger a su familia sigue siendo su prioridad, pero hay toda una reivindicación en todo esto. «Hay que ponerse en la mentalidad de las personas. Las personas mayores han vivido una época en la que ser homosexual era motivo para que te exterminaran pero poquito a poco se van quitando nudos y hay que seguir abriendo caminos para que amar no sea pecado. Porque no lo es», ha reconocido a Jordi Évole.