Más allá de los países, hay ciudades en las que puede ser interesante invertir. Porque si tener una visión general de un país es importante, el inmueble también se aprecia teniendo en cuenta las especificidades locales. Para ayudarte a encontrar dónde invertir en Europa, aquí está nuestra selección de ciudades imprescindibles.
Sóller (Mallorca – España)
La amplia variedad de propiedades de Sóller, combinada con su rico patrimonio cultural y su ambiente cosmopolita, ha hecho de la isla un verdadero punto de convergencia para los compradores inmobiliarios preocupados por la calidad. En 2021, el precio medio de los apartamentos se estabilizó en 800.000 euros. Para algunas propiedades excepcionales, se registraron precios aún más altos. Además de los históricos áticos y apartamentos con terrazas o balcones, el interés de los compradores se centra principalmente en las nuevas propiedades de alto rendimiento energético construidas según normas de construcción sostenibles y dotadas de interiores de alta gama.
Lisboa (Portugal)
¿Es demasiado tarde para invertir en bienes raíces en Portugal, y más precisamente en Lisboa? ¡No, todavía no! En el centro de la ciudad o «Baixa», los compradores de toda Europa ya están allí, pero la ciudad sigue siendo rica de hermosos barrios y apartamentos. Ciudad costera y montañosa, Lisboa atrae conferencias internacionales, eventos portugueses de envergadura y, por supuesto, un flujo de turistas. Todos estos atractivos hacen de la ciudad un destino múltiple. Nos alojamos allí una noche por razones profesionales, un fin de semana o una semana para unas vacaciones… El alquiler de temporada es poco arriesgado.
Berlín (Alemania)
Berlín es citada con frecuencia en el palmarés de las ciudades en las que es bueno invertir en Europa. ¿La razón? Invertir en bienes raíces en Alemania sigue siendo una apuesta segura, y Berlín atrae a numerosos turistas, pero también a empresas de todo el mundo que instalan una antena, sin olvidar a los estudiantes. La ciudad más grande de Alemania continúa su desarrollo y hay una gran mayoría de inquilinos.
Dublín (Irlanda)
Con una verdadera escasez de bienes y un atractivo económico siempre fuerte, la ciudad de Dublín constituye un destino de elección en Europa para realizar una inversión de alquiler. La ciudad es asequible para los inversores y rentable a largo plazo.
Madrid (España)
En Madrid, los precios de la vivienda aumentan constantemente, pero todavía están muy lejos de los niveles observados, por ejemplo, en París. Así, en los barrios más buscados del centro de la ciudad como Salamanca o Chamberí, encontrarás tu felicidad a menos de 5.000 € por metro cuadrado. Esto contrasta fuertemente con lo que se puede ver en París. Sin embargo, la demanda de alquiler es alta y la rentabilidad potencial es alta. La ventaja de Madrid reside en la gran variedad de bienes disponibles.
Londres (Reino Unido)
Con tasas de impuestos mucho más bajas que otros países europeos, una verdadera estabilidad económica y financiera y una demanda de alquiler siempre fuerte, Londres es una ciudad que atrae a muchos inversores. Pero con el Brexit, la incertidumbre ha ganado a los candidatos a la compra procedentes de países extranjeros. Sí, ya se percibe una estabilización del mercado que se detiene tras un crecimiento casi ininterrumpido de 20 años. Pero, aunque los ingleses son esquivos y la libra esterlina a veces muestra debilidades, Londres es un mercado aparte. Los precios resisten bien, incluso en caso de dificultades en otros lugares. La ciudad ofrece tanta variedad de barrios que es posible encontrar una propiedad para un alquiler rápido.
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