Las empanadas no dejan de ser una fina masa de pan y masa quebrada u hojaldre rellena con una preparación salada o dulce y cocida al horno o frita. Sin embargo, a casi todo el mundo le gustan y es uno de los platos a los que más recurrimos ya sea en casa o en forma de tapa en un restaurante. Las que te proponemos hacer en las siguientes líneas son veganas, un producto hecho a base de harina de soja que se presenta con distintas formas y tamaños, imitando los cortes de carne ya que utilizaremos el formato similar a la carne picada para rellenarlas.
Procedencia de las empanadas
Las empanadas son un plato tradicional de la mayoría de las cocinas de los países de habla hispana, como España e Hispanoamérica. Su origen se remonta a la costumbre de rellenar panes con viandas o vegetales, que los pastores y viajeros llevaban para consumirlos en el campo. Con el tiempo, se acabó cociendo la masa de pan junto con su relleno y, más tarde, se elaboraron otras masas para envolver el relleno. Esto dio origen a platos como los calzone italianos, las empanadas gallegas, los Cornish pasties británicos, los briks tunecinos o los börek turcos.
Ingredientes de estas empanadas
Esta receta de empanadas, recomendable sobre todo para personas veganas, es de una dificultad media y para llevarla a cabo vas a necesitar un máximo de 45 minutos. Los ingredientes que necesitarás serán 50 gramos de soja texturizada, una1 cebolla, ¼ morrón verde, ¼ morrón amarillo, ¼ morrón rojo, una rama de cebolla de verdeo, una cucharada sopera de salsa de soja, una cucharada sopera de salsa inglesa, una cucharadita de provenzal, una cucharada de postre de pimentón ahumado y una cucharadita de cúrcuma.
Hidratar soja texturizada
Si consumes huevo, puedes añadir a las empanadas pasas de uva, aceitunas y huevo duro para hacer el clásico relleno de las criollas, pero vegetarianas. Para empezar con la receta de estas de soja texturizada, primero hay que hidratar la soja con suficiente agua caliente para taparla, también añadir la salsa de soja y la salsa inglesa, ya que estas aportarán sabor y color. Si nos pasamos con la cantidad de soja hidratada, la podemos guardar en la nevera, en un recipiente herméticamente cerrado, durante tres o cuatro días.
Primeros pasos
Después de hidratar la soja de nuestras empanadas hay que pelar y picar la cebolla, y también lavar y picar la parte blanca de la cebolla de verdeo y los morrones para saltear todos los vegetales en una sartén a fuego máximo con 1 cucharada de aceite. Cuando la cebolla esté transparente, se baja el fuego a medio y se continúa salteando hasta que estén bien cocidos. Si se llegan a secar, el truco para solucionarlo es agregar una o dos cucharadas de agua caliente para levantar el fondo de cocción.
Se busca un relleno húmedo
Para continuar nuestra receta de empanadas, cuando los vegetales estén cocidos hay que agregar la soja hidratada, unas cucharadas del líquido donde la habías hidratado y el puré de tomate. Saltea durante unos 10 minutos y agrega más de este líquido si se está secando, ya que buscamos obtener un relleno húmedo y jugoso. Luego, retira y condimenta la soja texturizada al gusto con, por ejemplo, provenzal, pimentón ahumado, ají molido y cúrcuma.
Cómo cerrarlas
Cuando el relleno esté frío, podrás rellenar tus empanadas de soja texturizada. Para ello, hay que humedecer la mitad del borde para que, al cerrarlo, se selle perfectamente. Puedes hacer el repulgue que más te guste e ir disponiendo las empanadas con el cierre hacia arriba en una asadera previamente engrasada. Si lo deseas y consumes huevo, puedes pintarlas para que se doren mejor y cocinarlas en el horno precalentado fuerte a 200 ° C durante 20 minutos.
Tipos de relleno
Aunque estas empanadas que hemos hecho son muy especiales, y preferibles para veganos, lo cierto es que es un plato que admite multitud de tipos de relleno. Las puedes hacer con choclo (uno de los vegetales con mayor aporte de fibra) y salsa blanca, de calabaza y queso, de pollo fritas, de pollo y salsa blanca, de osobuco, de canastitas de espinacas, de vigilia con acelga, de canastitas de calabaza o acelga, de roquefort, de calabaza y choclo, de carne dulce, de verduras y pollo, de atún, de zapallitos, de verdura, de pollo al curry… Así hasta el infinito y más allá.