Como cada lunes, los fogones de Masterchef Celebrity 7 se prendieron y Ruth Lorenzo fue la gran protagonista de la noche. La cantante entró en el concurso con la motivación y las ganas de conocer de cerca la cocina, ya que su frenético ritmo de vida no le ha permitido hasta ahora poder disfrutar de ella. Aun así, tras el alto nivel que presenta esta nueva edición del programa estrella de TVE y que ya llevamos comentando en Cotilleo.es en las últimas semanas, Ruth Lorenzo ha tenido que decir adiós para convertirse así en la tercera expulsada de Masterchef Celebrity. Una eliminación que ha cogido a todos por sorpresa, ya que se esperaba que la cantante pudiera hacerse con las riendas del programa, además de ser de las más mediáticas.
Ruth Lorenzo no consigue brillar con el ‘wok murciano’
>El programa de anoche brindó grandes momentos, y es que, las nuevas pruebas tienen un buen gancho y hacen ver de forma más llamativa cómo los famosos crean sus platos, algo que atrae al espectador. A veces es difícil que desde sus casas la audiencia se pueda poner en el lugar de la cocina de vanguardia, pero cuando se trata de tirar de nostalgia y pasado, todo se vuelve más especial. Por ello, anoche, los aspirantes a chef tuvieron que tirar de imaginación y enfrentarse a una prueba de cocinado sobre el refranero español.
Bajo la premisa de «El aceite de oliva es armero, relojero y curandero» o «Pan, uvas y queso saben a beso», tuvieron que elaborar sus platos escogiendo esos ingredientes. Pero sin duda, la espectacularidad se la llevó la prueba por equipos, en la que los aspirantes salen de las cocinas de Masterchef para poner rumbo a los fogones de exteriores y por los que viajan a puntos de nuestro país, como fue esta vez al gran teatro de Mérida.
Tras una prueba desastrosa por parte del equipo rojo, los delantales negros tuvieron que enfrentarse a la prueba de eliminación, en la que estaba Ruth Lorenzo. Los aspirantes tuvieron que salvarse las espaldas con la cocina de fusión y a la cantante no se le dio nada bien. Empezó la prueba algo perdida, pero finalmente se decantó con un ‘wok murciano’, un plato que preparó con salsa de lima agridulce, tomate de pera de la huerta murciana, verduras y patatas agridulces. Una mezcla que no terminó de convencer a los chefs y jurado Pepe Rodríguez, Samantha Nágera-Vallejo y Jordi Cruz.
«Me llevo la oportunidad de hacer algo que no es mi día a día […] Me llevo las miraditas de Jordi y pasar por esta experiencia, que es un volcán de emociones», ha dicho Ruth Lorenzo en su despedida. Un adiós que ha dejado muy emocionadas a sus compañeras y también amigas Lorena Castell y Daniela Santiago. Pero, la eurovisiva ya pone la mirada en una posible repesca y ha avisado: «Soy una luchadora que nunca jamás me rindo y que voy a estar cocinando mucho por si acaso vuelvo».
Como Tamara Falcó, se derrite por Jordi Cruz
>Si de algo puede presumir Jordi Cruz cada vez que las cocinas de Masterchef Celebrity se ponen a funcionar, es de los halagos que siempre recibe por parte de los aspirantes. El chef ha acaparado toda la atención de Ruth Lorenzo desde el primer programa, en el que confesó que se sentía muy nerviosa de tener a Jordi muy cerca de ella. Según la cantante vive enamorada del juez y no ha dudado en compartir «miraditas» con él, poniendo así el punto más picante de este séptima edición. Por ello, la marcha de Ruth Lorenzo no ha podido terminar sin tener un acercamiento más con el chef y ambos protagonizaron el momento de la noche.
Tal y como os dejamos sobre estas líneas, podéis ver, queridos Cotillas, el baile que Ruth Lorenzo y Jordi Cruz se marcaron. Un divertido momento en el que la cantante ha descubierto la verdadera personalidad del cocinero. Y, es que, la murciana se preguntaba: «Lo ves en la tele y dices ‘¿será simpático?’. Y lo es». Y eso no es más que una sensación muy parecida a la que tuvo Tamara Falcó.
La socialité, que está atravesando ahora su peor momento con la infidelidad de Íñigo Onieva, protagonizó un sonado acercamiento también con Jordi Cruz. La hija de Isabel Preysler, al igual que Ruth Lorenzo no pudo sucumbir a los encantos del chef. De hecho, Tamara Falcó llegó mucho más allá que la cantante y es que logró hacerse con el premio a mejor chef de la edición, pero sobre todo con un apasionado beso con Jordi Cruz. Un momento que puso al mundo del corazón en pie, pues para nada se estaba acostumbrado a esa faceta tan emocional y extrovertida que mostró durante todo el concurso la Marquesa de Griñón.
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