Desde que saltara al mundo del streaming con La Marquesa en Netflix, el deseo de Tamara Falcó era claro. La hija de Isabel Preysler descubrió todo un mundo y nosotros con ella, en el momento en el que conoció a Íñigo Onieva, su gran amor. La marquesa de Griñón es una mujer nueva desde que el amor llegó a su vida y eso es algo que ha estado compartiendo en los últimos meses.
Ya en el documental de la plataforma pudimos descubrir que la vida que había creado con el cocinero era todo lo que estaba esperando, pero solo le faltaba algo, que aunque no lo dijera directamente, siempre estaba ahí. La socialité tenía siempre en mente la idea de una propuesta de matrimonio, imágenes de cómo sería su boda o incluso el vestido que llevaría.
Pues bien, parece que de tanto frotar la lámpara, el genio le ha concedido su mayor deseo: pasar por el altar. La aristócrata tiene tanta fe en su chico que ha aceptado en que sea su hombre y marido para siempre. Tamara Falcó no ha querido esperar más y ha hecho público a través de sus redes sociales lo que llevaba tiempo esperando. Íñigo Onieva ha puesto por fin el anillo de pedida en su dedo y ¡habemus boda!. Tamara Falcó ha dedicado unas profundas palabras a quien será su compañero de vida en la salud y en la enfermedad y hasta que la muerte les separe, como así recogen los votos matrimoniales a los que se aferra la socialité.
Tamara Falcó e Íñigo Onieva pasarán por el altar
>«Antes de conocerte me sentía completa y contenta pero fue cruzarnos y que mi vida diera un giro a mejor, totalmente inesperado», ha comenzado Tamara Falcó a escribir en sus redes sociales este mensaje para Íñigo Onieva. La marquesa de Griñón ha compartido una fotos de los dos fundiéndose en un apasionado beso y enseñando un anillo perlado a cámara.
A Tamara Falcó le parece todo esto una locura, como así se lo ha hecho saber a sus seguidores, donde ha compartido con ellos también una reflexión bíblica: «como también dice San Pablo, en su carta a los Corintios: al final, en la vida lo único que importa es el Amor». En el texto se ha podido visualizar a una Tamara Falcó tremendamente emocionada hasta el punto de escribir amor en mayúscula, todo porque «se lo merece y esa felicidad que describo, es el resultado de ese respeto, cariño y admiración que tenemos el uno por el otro».
Tras dos años de noviazgo llega lo más esperado para la también exconcursante de Masterchef Celebrity, poder pasar por el altar con su chico, el empresario hostelero que le hizo sentir por primera vez enamorada. Y, es que, si hasta ese momento le había acompañado algo tan fuertemente a Tamara Falcó era la fe cristiana y católica, a la que por supuesto y tal y como hemos podido leer también tiene hueco.
La marquesa de Griñón dice así dejar «atrás la perfección mundana» para darse por completo al amor en una unión que «esperamos que bendiga Dios con su luz». Y, es que, Tamara Falcó ha encontrado en Íñigo Onieva una conexión que dice estar «construida sobre la confianza y el afecto» que se profesan ambos. No hay duda de que la hija de Isabel Preysler montará una gran ceremonia religiosa que acaparará toda la atención mediática.
Eso sí, Tamara Falcó no ha adelantado en este mensaje cuándo será el esperado enlace ni dónde, es algo que tendremos que esperar a saber. Lo que sí ha querido la aristócrata es cerrar esta buena nueva con una total declaración a su futuro marido:
«Gracias por proponerme ser tu compañera de por vida. Me siento la mujer más afortunada del planeta y el sí que te di te lo repito y te lo dejo por escrito para que no se te olvide jamás. Te quiero, Íñigo Onieva«.
Juntos en las adversidades
>En sus dos años de noviazgo tanto Tamara Falcó como Íñigo Onieva han tenido que lidiar con las continuadas insinuaciones sobre las infidelidades del empresario. El futuro marido de la aristócrata es un jefe de las noches por lo que es muy común verle saliendo de fiesta con amigos y de ahí los tantos rumores.
Esto es algo que a priori ha dejado de afectar a Tamara Falcó, que ya en su documental dejó clara la confianza que tenía hacía su chico. De hecho, según informaciones que arrojó Miguel Frigenti hace unos meses en Sálvame de una fuente cercana, es que la Marquesa estaría al tanto de todo lo que hace su futuro marido y «lo respeta mientras él respete su modo de vida».
Sea como fuere, está claro que Tamara Falcó ha encontrado en Íñigo Onieva a su primer gran amor y con el que ha decidido seguir compartiendo su vida en su nueva etapa de los 40 años, de hecho será el próximo 20 de noviembre cuando cumplirá los 41. Además, queridos Cotillas, sabemos que la pedida tuvo lugar en un sitio muy especial, tal y como ha adelantado Paloma Barrientos en El programa de Ana Rosa. Íñigo Onieva le pidió matrimonio a Tamara Falcó en su restaurante efímero El Rincón, un lugar del que la socialité se siente muy orgullosa.