Fran Rivera se ha sentado este sábado con Toñi Moreno en Déjate querer y ha dado una entrevista en la que no ha dejado nada en el tintero. El torero se ha sincerado sobre su infancia, sus padres, las adicciones de Carmina Ordóñez… una conversación con la presentadora con la que han reflejado la buena relación que hay entre ellos, que nos ha permitido acercarnos un poquito más al hermano de Cayetano Rivera.
Fran Rivera, a corazón abierto con Toñi Moreno
El torero le confesaba a Toñi que ha tenido que hacer muchas preguntas al entorno de su padre para llegar a conocerlo más ya que cuando sufrió la cogida que le provocó la muerte, él todavía era muy pequeño: «Tengo muchos recuerdos pero era muy pequeño y me falta información. Me ha faltado conocerlo de hombre, pero me hago una idea».
Y es que el cariño hacia su padre y el no tenerle a su lado es algo que ha notado en todos los momentos de su vida, de hecho, le encantaría saber si Paquirri se sentiría orgulloso de él como torero: «Es de las pocas preguntas que me dejan sin dormir... Si mi padre estaría orgulloso de mí como torero y como hombre».
En cuanto a su madre, Fran ha sido de lo más sincero: «El favorito de mi madre soy yo. Está feo decirlo pero es verdad» y ha dejado claro que cuando ella falleció no estaban enfadados: «Sí estuve un tiempo enfadado, pero entendí que una adicción como la que tenía mi madre destruye a una familia. Yo lo trato como una enfermedad, hace mucho daño a todos porque ves cómo se está autodestruyendo«.
Derrochando halagos hacia su madre, Fran ha asegurado que: «La adoraba y la echo de menos todos los días, ella no sabía estar sola y quería que todo el que estuviera alrededor estuviera feliz» y ha resaltado su gran faceta de madre: «Ella tiró de su casa sola, en mi casa nunca faltó nada gracias a mi madre. Tuvimos de todo, pero la que lo trabaja y se lo curraba era ella. La comida, la ropa, los viajes, los campamentos… Todo lo trajo mi madre».
Fran estuvo muy volcado con su madre en el tema de sus adicciones y lo pasó fatal al ver cómo se iba destruyendo… como no podía ser de otra manera, el torero ha mandado un mensaje muy claro sobre este tipo de enfermedad: «Las adicciones destrozan a las familias, es lo peor que te puede pasar».