Estamos más que acostumbrados a comer comida enlatada, prácticamente las latas de aluminio están en casi cualquier alimento que se quiera conservar, incluso en los refrescos. Este invento nació de la necesidad de preservar la comida durante las épocas de guerra, ya que eran tiempos difíciles y en escasas ocasiones podías preparar una comida recién hecha. Entre los soldados que se iban a luchar al frente y el racionamiento, las conservas vinieron de lujo para sobrevivir cuando el hambre asolaba. Ahora su función aunque es la misma, las usamos de manera diferente, incluso innovadora, ya que las latas de los refrescos tienen una función secreta que no conocías. ¿Quieres saber cual es? Te la contamos.
1Las anillas tienen un truco que apenas nadie conoce
Hubo un tiempo en el que, para poder coger la comida que venía dentro de estos envases, había que utilizar un abrelatas. Sin embargo, los tiempos cambian y las latas al igual que las tecnologías van renovándose. En la actualidad, casi todas las latas cuentan con una anilla que permite abrirlas con más facilidad. Pero no todas las anillas son iguales, ya que no puedes comparar las de las latas de las sardinas con la de los refrescos. Una vez abres un recipiente de sardinas en conserva la anilla se deforma y no puedes usarla para nada más. En cambio, las otras tienen una función clave.