El cuidado de las uñas es fundamental y no solamente el estético. En los últimos años se ha puesto de moda llevar la manicura permanente porque queda increíble, no se estropea y es duradera. El problema está que el abuso de este tipo de esmaltes ponen en riesgo la salud de las uñas naturales. Es importante no realizarlas seguidas permitiéndole a las uñas un descanso para que se oxigenen.
1El exceso de uso de los esmaltes permanentes
Muchas mujeres tienden a hacerse la manicura permanente con frecuencia sin ser conscientes de los efectos adversos para la salud que pueden sufrir con este hábito. Este tipo de esmaltes provocan que la lámina ungueal, situada debajo de la uña, se quiebre fácilmente. Llevar a cabo esta práctica de manera continuada va debilitando las uñas causando daños en el aspecto natural. Además la dermatóloga Nayra Merino afirma que «si se utiliza de forma permanente este tipo de esmaltes puede enmascarar enfermedades de las uñas o signos de otras patologías sistémicas, pues son clave en el diagnóstico de enfermedades renales, hepáticas, endocrinas y cutáneas».