Hoy los Martínez de Irujo están de celebración. Si hace pocos días Eugenia celebraba su aniversario de boda con Narcís Rebollo en Las Vegas, hoy continúan sus celebraciones. La hija de la Duquesa de Alba cumple 53 años en uno de los momentos dónde las redecillas familiares vuelven a estar a la orden del día.
A pesar de que la polémica rodea a su familia una vez más tras la misa del 7º aniversario del fallecimiento de su madre, Eugenia disfruta de uno de sus mejores momentos personales. Se encuentra en una tranquilidad merecida, en paz con su familia y felizmente enamorada.
La relación familiar, en uno de los mejores momentos
«Ahora está todo muy bien, muy estable. Hemos madurado todos» decía Eugenia Martínez de Irujo hace unos días cuando le preguntábamos por cómo estaban las relaciones familiares, ya que no siempre ha estado en buena sintonía con sus hermanos.
Lo cierto es que zanjaba con esa contestación todas las especulaciones y explicaba que está viviendo uno de sus mejores momentos personales. Además, zanjaba la polémica de porqué no había ido a la misa de su madre diciendo: «Yo creo que es raro siete años haciendo misas. Yo siempre digo que para recordar a mi madre no me hacen falta misas, yo la llevo aquí«.
Su hija es su mayor orgullo
En cuanto a su hija, Eugenia se deshace en halagos, le emociona la buena relación que tiene con su tío Cayetano. Además, no puede estar más orgullosa de ella y asegura que ha sacado lo bueno de su familia y de la del padre: «Yo siempre digo que ha sacado lo mejor de cada casa. Lo mejor de los Ordóñez, lo mejor de los Alba, de los Martínez, de los Rivera». Y lo cierto es que Tana Rivera es uno de los rostros más empáticos de la aristocracia española. Tana es un claro ejemplo de su abuela, la Duquesa de Alba.
Está claro que Eugenia cumple años en uno de los mejores momentos de su vida y con la mejor estabilidad familiar. Además, aunque no vaya a celebrarlo el mismo día, seguro que Eugenia lo celebra con una de esas fiestas en la que los invitados dan lo mejor de sí.