Visiblemente más tranquila que en los últimos días, Raquel Mosquera continúa con su día a día centrada en sus hijos. Después de haber estallado en sus redes sociales el pasado fin de semana ante las insinuaciones en diferentes programas de televisión sobre su matrimonio con Pedro Carrasco y sobre los hábitos que podría tener el exboxeador, la peluquera ha decidido instalarse en el silencio.
Así, de lo más sonriente y asegurando que «entiende y comprende» el trabajo de los reporteros que a diario acuden tanto a la puerta de su casa como a su centro de belleza situado a las afueras de Madrid, Raquel agradece «el respeto» que recibe por parte de la prensa en los últimos días pero prefiere no comentar las insinuaciones que se han hecho sobre ella, asegurando que manejaba a Pedro Carrasco a su antojo.
Sin perder la calma, la peluquera deja en el aire la posibilidad de emprender acciones legales para defender la memoria de su marido después de que se haya cuestionado por qué este iba haciendo eses con el coche tras su último encuentro con su hija. La peluquera tampoco aclara si, como se planteó recientemente, responderá en exclusiva a las polémicas declaraciones de Rocío Carrasco en su docuserie, ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’.
Una postura discreta que ha mantenido también a su llegada a su puesto de trabajo, evitando comentar las últimas noticias que cuestionan la versión de Rociíto ni confesar si tiene relación con Antonio David Flores. Mirando a los ojos al reportero en todo momento, Raquel prefiere no contestar si considera capaz al excolaborador de haber grabado situaciones comprometidas de Rocío Jurado y de José Ortega Cano con las que tendría atemorizado al mediático clan.