Tras conocerse la condena de tres años de prisión a su marido Nicolas Sarkozy por corrupción y tráfico de influencias, Vanity Fair España publica una entrevista en exclusiva a Carla Bruni. En este reportaje se hace extenso repaso de un periplo vital que la ha llevado de ser supermodelo en los ochenta, cantante de éxito internacional a finales de los noventa y primera dama de Francia de 2008 a 2012.
El pasado mes de diciembre Carla Bruni acompañó a Nicolas Sarkozy a una de las sesiones del juicio. Ese mismo día aprovechó para compartir en Instagram una imagen con un texto que rezaba: Stand by my man «Apoyo a mi hombre». Aludía así al clásico Stand By Your Man de la cantante country Tammy Wynette, que Bruni incluyó en su anterior disco. «Bueno, quizá no sea una canción muy feminista, al menos tal y como se entiende hoy el feminismo, de esa forma tan militante. Pero a mí todavía me gusta apoyar a mi hombre… Y ¿sabes qué? Que mi hombre también lo hace. Es un intercambio. Mi hombre me cuida. Si tengo un problema, él está ahí. Todo el tiempo. Es algo mutuo».
Carla Bruni aprovecha para desmentir de forma tajante que su marido tenga intención de volver a la política. «Mi marido no volverá a la política porque no quiere divorciarse«, revela. «Está muy enamorado, así que tendría que cambiarme por otra (risas). No, no, no, no más política, ¡se acabó! No solo por mí sino porque mi marido que, en mi opinión, ha sido el mejor presidente que hemos tenido en años, no fue reelegido. Y esto es una democracia, así que se acabó. ¡No, no, no! No va a volver a la política«, insiste.
«Él es un hombre de acción. Tiene un nuevo empleo, mi marido es abogado, y está trabajando muchísimo. Gente de todo el mundo viene a París a pedirle consejo. Por primera vez en su vida está ganando algo de dinero, porque como sabrás, a los políticos no les suele ir muy bien en ese aspecto. Tenemos cinco hijos, tres nietos, somos felices. No queremos más política… Está en otra etapa de su vida y es feliz», zanja Bruni. Para más información, ya está la revista en el quiosco.
La modelo y cantante ha demostrado que sigue siendo un icono de elegancia, como ya se vio durante su visita oficial a España. En aquella ocasión se batió en duelo de elegancia con la Reina Letizia, princesa por aquel entonces, y el resultado fue un merecido empate en saber estar y estilo.