Alejandra Rubio sigue en el candelero. La relación de la joven con su tía Carmen Borrego sigue siendo uno de los principales temas polémicos en la familia Campos. A pesar de la aparente paz entre ellas, sus apariciones en ‘Viva la vida‘ están protagonizadas por una gran tensión en la que saltan las chispas.
Esta situación y el protagonismo de la joven, no evita que la prensa se preocupe por ella y por su opinión al respecto de los temas que le afectan directamente a ella o a su familia. Sin embargo, aunque le gusta el trabajo en los platós no acaba de entender que su repercusión va más allá de los estudios de la televisión, y que la fama conlleva el seguimiento de las cámaras por la calle. Esta desgana que ella muestra ante el trabajo de los periodistas de la calle, hay que reconocer que no la tiene ni su abuela ni su madre, que siempre atienden a los compañeros, al igual que su tía Carmen.
Ese nivel de sinceridad que Alejandra está mostrando en televisión le está causando graves conflictos, y por eso está aprendiendo a que no siempre ha de decir toda la verdad de sus sentimientos.
«Con el otro día creo que hay que zanjar esto de una vez. Me parece muy bien que cada uno opine lo que quiera. Están en su derecho». Estas han sido las palabras de joven cuando le preguntan por el tenso programa que protagonizó junto a su tía el pasado fin de semana. Aunque la joven salió de plató visiblemente sobrepasada por la situación, Alejandra asegura que «todo está muy bien» con su tía con la que quiere olvidar cualquier tipo de distanciamiento.
Cansada de que se siga hablando sobre el tema a pesar de que ambas han insistido en que quieren que todo se olvide, la hija de Terelu Campos insiste en que no va a seguir hablando del tema: «Es que no quiero entrar porque si digo algo, va a ser peor, entonces prefiero no decir nada» sentencia la joven ante la insistencia de la prensa.