No hay duda de que Ariana Grande está atravesando por uno de los momentos más duros y dramáticos de su vida. El pasado lunes, tras su concierto en Manchester, el Estado Islámico, a través de uno de sus miembros fanáticos, perpetraba un atentado terrorista en el pabellón donde se estaba celebrando su show. 22 personas asesinadas y más de 50 heridos en el atentado más sangriento que ha sufrido Manchester en su historia. Ariana Grande, a las 4.51 de la madrugada de aquel fatídico lunes, rompía su silencio con el siguiente tuit:
broken.
from the bottom of my heart, i am so so sorry. i don't have words.— Ariana Grande (@ArianaGrande) May 23, 2017
Desde entonces, nadie de su equipo se ha pronunciado respecto a su estado anímico o lo que sucederá con su gira de conciertos. Algunos medios, a través de un comunicado no oficial que publicaba el portal ‘TMZ’, apuntan a que Ariana Grande habría cancelado su gira mundial de forma indefinida. Y parece que es cierto, pues la joven artista habría tenido su siguiente concierto el próximo jueves en Londres y de momento, Grande ha decidido marchar a casa.
Tal y como recogen algunas publicaciones, su amiga Taylor Swift le habría dejado su jet privado para que Ariana volviese a casa. Las imágenes, a su llegada al aeropuerto de Boca Ratón, en el estado de Florida, recogen a una Ariana traumatizada, devastada y tal y como ella misma dijo, «rota de dolor». Su chico, el rapero Mac Miller, la esperaba a pie de pista para darle todo su cariño y su apoyo. Las fotografías hablan por sí solas:
EXCLUSIVE: Ariana Grande pictured for the first time since Manchester attack https://t.co/5Is46ue5E8 pic.twitter.com/HFpmb9TXjK
— Daily Mail Celebrity (@DailyMailCeleb) May 23, 2017
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