Kiko Matamoros siempre se acaba saliendo con la suya. Pese a que el colaborador confesaba en Sálvame que él no estaba interesado en las máquinas deportivas que hasta ayer disfrutaban Makoke y Javier Tudela en la famosa casa de «La Finquilla», los aparatos que tras mucho esfuerzo ha conseguido «arrebatar» a su exmujer ya «adornan» el palacete al que el colaborador acaba de mudarse con su novia, Marta López.
Ambos son apasionados del deporte y cultivan a diario su cuerpo sudando la gota gorda en el gimnasio, por lo que cuando la marca deportiva que en su día cedió a Kiko los aparatos le propuso retirarlos de la casa de Makoke para que volviesen a su legítimo propietario, el colaborador de Sálvame ni se lo pensó.
Así, esta misma mañana los operarios que ayer desmantelaron el gimnasio de Makoke, han llegado a la nueva casa de Matamoros dispuestos a montarle, en una de las numerosas estancias de su espectacular vivienda una sala de ejercicios que a buen seguro hará las delicias de Marta López, además de las del propio Kiko.
El colaborador, que ha definido como un «acto de justicia» que la marca retirase los aparatos de la casa de su exmujer, ha supervisado personalmente la mudanza de las máquinas de ejercicio a su palacete, dando indicaciones a los operarios sin poder ocultar su satisfacción tras esta dulce victoria frente a su gran enemiga, Makoke, a la que ha dejado compuesta y sin gimnasio. ¿Qué opinará Anita Matamoros sobre el último gran golpe de Kiko Matamoros?