Cayetano Rivera no va permitir que nadie más le tome el pelo, y lo ha dejado muy claro en los Juzgados, donde ha sido capaz de enfrentarse a la misma Junta de Andalucía. Así, el torero demuestra que no le teme a nada ni a nadie, y manda un aviso muy claro a todos aquellos que pretendan hacerle daño. ¿Una amenaza indirecta a Karelys, su supuesta amante, o a Isabel Pantoja?
Recordemos que el diestro ya ha sacado su carácter en más de una ocasión, sobre todo si de defender a su familia se trata. Y es que montó en cólera cuando los fotógrafos quisieron fotografiar a su hijo a principios de año. Además, ya ha demostrado que junto a sus hermanos, Fran y Kiko, piensa llegar hasta el final para recuperar la herencia de su difunto padre, Paquirri. ¿Lo logrará?
1La advertencia indirecta de Cayetano a Karelys
> Cayetano Rivera ha sido capaz de enfrentarse a la propia Junta de Andalucía para defender sus derechos como torero, algo por lo que lleva peleando tres años. Y es que durante una faena realizada en la corrida goyesca de Ronda, donde se ganó el máximo reconocimiento para un matador: las dos orejas y el rabo del animal, el presidente de la plaza de toros se negó a concederle este último, algo que indignó muchísimo al diestro. «Este es el segundo rabo que me quitas y ya no me quitas más», explotó cabreadísimo contra la máxima autoridad del lugar, lo que le valió una sanción de 500 euros por haber cometido una infracción de desobediencia a las órdenes de la Presidencia.
Un tema que terminó llegando a los Juzgados, de donde por fin ha salido victorioso. ¿Una advertencia a todos aquellos que insisten en atacarle? Recordemos que desde que el huracán Karelys llegara a su vida, tanto Cayetano como su mujer, Eva González, han estado en el punto de mira. Y es que la pareja ha tenido que soportar las continuas acusaciones de infidelidad, además de afrontar rumores de separación y ruptura.
Después de que la abogada aireara los supuestos trapos sucios de una relación secreta de seis años. «Nos conocimos por unos amigos hace ocho años, y estuvimos viéndonos después de unos meses de conocernos. Luego dejamos de vernos pero, de continuo, han sido alrededor de unos seis años de relación», contaba a la revista Lecturas. «Cuando empezamos él no estaba soltero, tenía pareja, pero iba detrás de mí. Yo tenía 21 años. Me decía que era importante en su vida y me hacía sentir especial. Si yo he estado ahí ha sido porque él no me dejaba ir».
Unas declaraciones demoledoras que casi destruye el matrimonio del diestro, y además le hizo plantearse interponer una demanda por derecho al honor y la intimidad, aunque finalmente no sabemos si las medidas legales se han llevado a cabo.
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