Tamara falcó hace lo que le apetece y se la vuelve a pillar saltándose las normas establecidas por el Gobierno. Sin mascarilla y saltándose las restricciones perimetrales, una vez más.
En el mejor momento de su vida a nivel profesional con nuevos proyectos en mente y feliz al lado de su pareja Iñigo Onieva, Tamara Falcó no pude ocultar la sonrisa de su rostro. Hace tan solo unos días conocíamos la noticia de que la joven ha adquirido una casa en propiedad muy cerca de la de su madre y es que Tamara no ha querido dejar el barrio en el que vive desde hace años y con el que está encantada.
En esta ocasión la pareja disfrutó de la jornada en casa de Íñigo de donde Tamara salió a última hora de la noche para marcharse de regreso a casa. Sin mascarilla para subirse rápidamente al coche, Tamara volvió a infringir las restricciones perimetrales que afectan a La Moraleja donde está situada la vivienda de su chico. Si hace tan solo unos días la hija de Isabel Preysler tuvo que pedir perdón por no respetar las restricciones de movilidad, en esta ocasión la ganadora de ‘Masterchef Celebrity’ volvió a olvidarse de los consejos de las autoridades sanitarias.
Consolidando su pareja día a día, Íñigo y Tamara han demostrado que su relación va viento en popa. Exprimiendo al máximo el tiempo que tienen para estar juntos en estas fechas navideñas, la pareja ha encontrado en Álvaro Falcó e Isabelle Junot los compañeros perfectos con los que compartir sus salidas por la capital.
Con un look de inspiración ‘boho’ de lo más favorecedor, Tamara lució para la ocasión vestido estampado en tonos morados, botas marrones y chaqueta de punto en color blanco.
A pesar de su simpatía, la nueva marquesa de Griñón se cree por encima del bien y del mal, y con su característica inocencia, se salta las normas…¿es inocente y hace las cosas sin querer, o es demasiado lista y ese papel de despistada le viene a las mil maravillas?