«Tomároslo con calma porque esto va para largo». Con esta máxima, una prudente y bellísima Paula Echevarría confirmaba ayer, de forma implícita, que su historia junto a David Bustamante, su marido desde hace casi once años, había llegado a su fin. La noticia, efectivamente, no es que David y Paula se separen, de hecho, llevan ya más de dos meses haciendo vida por separado, según fuentes cercanas a la pareja. La verdadera noticia es por qué una pareja que en apariencia era tan feliz ahora toma la determinación de separar sus vidas definitivamente. Empiezan a barajarse los motivos de su inminente divorcio, y es que según cuentan a ABC personas del círculo más íntimo de la pareja «David y Paula llevan tiempo intentando superar una crisis pero es imposible. Mejor hacer vidas por separado y poder ser felices. Si han llegado hasta aquí ha sido por su hija, a la que adoran. La niña tiene devoción por sus padres y lo último que quieren es que sufra, pero ya es insostenible».
Otra de las razones que suenan con más fuerza es el ritmo de vida de David en comparación al de Paula. Ella, mucho más tranquila y con una vida más de puertas hacia adentro y David, según contaban ayer compañeros en ‘Sálvame Diario’ y en la mencionada publicación «había salidas de David y compañías que no gustaban mucho a Paula…». Un argumento que sostiene el periodista que desveló todo este entramado, Antonio Rossi, quien sostiene que «se separan por el modo de vivir diferente. El día a día que lleva la pareja es incompatible». El cantante se encuentra «destrozado» y buscando piso para empezar una vida de cero según explicaban en el programa de las tardes de Telecinco. Se descarta, por el momento, la posibilidad de que exista una tercera persona. Habrá que esperar a que mañana la actriz, en el evento de presentación de sus perfumes, hable tranquilamente y arroje luz a la que es sin duda, una de las noticias del año.