No sabemos si la colección de follones mediáticos que está protagonizando Jorge Javier Vázquez en los últimos meses tienen como objetivo secreto el ocultar su pérdida de eficacia como presentador en formatos diversos como Gran Hermano o el Deluxe. Pero el de Badalona no descansa: da igual Isabel Pantoja, de la que dice ahora que le cogería el teléfono tras decir que preferiría estar en la mierda antes que a su lado, o Pablo Iglesias y Susana Díaz, que han sufrido sus artículos en Lecturas.
Una guerra que va camino de enquistarse es la de protagoniza junto a Toño Sanchís, a la que le reprochan que denuncie cosas de Belén que antes callaba, cuando algunos hacen lo mismo que él: antes disimulaban sus patadas al diccionario y sus formas de hacer porque sabían que era el peaje que pagar para acceder a la estrella rosa más eficaz de las dos últimas décadas, Belén Esteban. El manager denunciaba hace unos días la supuesta petición de despido que había lanzado el presentador: «Jorge Javier Vázquez se retrata cada día más con sus hechos y con sus malas formas. Pedir a una cadena que no me de trabajo me parece de lo más repugnante que se le puede desear a alguien. Eso es lo que han intentado desde que salió toda la historia. Yo llevo 15 años dando las audiencias. No me las invento. Todos los días pongo los datos de todos los programas. Si hay una cadena a la que estoy ligado profesionalmente y personalmente es a Telecinco, a la que agradezco muchísimo el trabajo que hemos compartido juntos. Siempre remo a favor de obra para ello».
El presentador intentó este viernes contextualizar sus palabras, pero la hemeroteca evidencia que exigió abiertamente su despido: «A veces bajamos un poquito en Sálvame diario, que lo hacemos pocas veces porque gracias a ustedes vamos a hacer ocho años. Y yo no entiendo que Toño, trabajando en esta cadena, y ganando dinero de esta cadena, se le permita hacerse eco de las malas noticias que afectan a programas de esta cadena. Yo, desde luego, no lo permitiría. A mí me hacen gracia las cosas de Toño, porque es muy obvio, hace cosas de niño pequeño y en sus redes se pone delante de la foto de Jesús Vázquez y pone ‘aquí estoy ante el mejor presentador de Telecinco’, y yo sé que es un mensaje para mí. Me parece una cuestión de lealtad alegrarte de las buenas noticias que suceden en tu cadena, no de las regulares o de las malas. Pero claro, estamos hablando de lealtad con Toño Sanchís. Me parece que deberían tomar cartas en el asunto y empezar a darte un toque. Y si hay que echarle, se le echa. Hay que querer a las empresas para las que trabajas y, si no estás a gusto y si no te alegras del éxito de los demás, porque además tú cobras dinero gracias a que esto vaya bien, pues a tomar por saco
La última «víctima» de Jorge Javier Vázquez ha sido Irma Soriano, presentadora reciclada en concursante que está hartando con su comportamiento dentro de la casa de GH VIP a su colega: «Ahora está en Gran Hermano VIP con el propósito de relanzar su carrera. Podría convertirse en un personaje de reality de primera línea porque es sentimentalmente exagerada, dramática y un pelín teatrera a la antigua usanz. En el fondo ella considera que no debería de estar en este programa. Hace mal. Mostrarse a medio gas le está impidiendo explotar y llevarse al personal de calle. Su excesivo pudor la está matando». ¿Es la última batalla del catalán? Para nada, porque este fin de semana la actriz Antonia San Juan ha denunciado un supuesto caso de homofobia porque la ex componente de La que se avecina dice que le llamó «Antonio». ¿Habrá consecuencias? Tiempo al tiempo.