¿Para qué darle más vueltas? ¿Por qué ocultar algo tan bonito como el amor? No había más remedio que admitirlo. Con prudencia, pies de plomo y sin prisas, Rocío Crusset ha confirmado algo que todos sabíamos: mantiene una bonita relación con el modelo cubano Juan Betancourtt. La sevillana rompía su relación con Jaime Soto el pasado mes de agosto y los rumores de la existencia de una tercera persona surgieron desde el principio. Ambos negaron la mayor. Tanto es así que, hace apenas un par de meses, el propio Betancourtt ante las cámaras de esta revista desmintió su relación con Rocío aunque la colmaba en bonitas palabras y le auguraba un exitoso futuro como modelo de pasarela y fotografía.
Rocío no para de viajar. Su trabajo es ese: Sudáfrica, Milán, Australia… Aunque ahora se encuentra en Madrid para realizar los desfiles de la próxima Mercedes-Benz Fashion Week que empieza precisamente hoy. En estos días, y con motivo de su visita a la capital, Rocío pasaba por las ondas de Herrera como modelo e invitada especial. Su padre, Carlos, le comentaba «dicen que hay un muchacho que te ronda», «disculpa, Carlos, pero no hablo de temas personales», le espetaba, graciosa, la hija de Mariló Montero. Tras esta intervención radiofónica, Rocío acudía anoche a la presentación de Lo que de verdad importa, la película de Paco Arango cuyos beneficios obtenidos serán donados en su totalidad a una red de campamentos para niños enfermos. «Es un amigo especial. No lo niego. Pero ni estoy enamoradísima ni me voy a casar. Es un chico maravilloso y muy humilde», confirmaba Rocío Crusset, quien ha conseguido desligarse profesionalmente de los apellidos Herrera y Montero.
Los tortolitos no han dejado de darnos pistas a través de las redes sociales. Uno de los spoilers fundamentales para descubrir lo afianzado de esta relación -de la que LOC hablaba desde el pasado mes de agosto- vino de parte del también modelo Xavi Serrano, íntimo amigo del cubano. «¡Todo el viaje aguantando velas!», haciendo alusión a que sus amigos, Juan y Rocío, no paraban de darse besos y abrazos por las calles de Milán. Además, el Instagram de Betancourtt, puramente profesional, ha dado una pista clave: la única chica que sale en sus últimas 40 fotos es Rocío Crusset.
Por no hablar de lo helados, estupefactos y patidifusos que nos dejó la publicación que el cubano hizo el mismísimo 14 de febrero, día de San Valentín. Un corazón enorme con dos letras TK (= Te quiero). No sabemos si fue un regalo de ella hacia él o de él hacia ella pero sea como fuere… ¡VIVA EL AMOR!