María José Campanario explota en televisión y confiesa en qué situación está su matrimonio

La salud de María José Campanario es motivo de noticia. Son muchas las ocasiones en las que la castellonense ha tenido que acudir a los hospitales este año. Desde una intervención por una hernia, hasta unos mareos injustificados. Sin embargo, las alarmas saltaron hace quince días cuando la mujer de Jesulín de Ubrique ingresaba de urgencia tras una reacción alérgica a una inyección que se le fue administrada vía intramuscular. La paciente, que es sensible a nuevas alergias, desconocía que el medicamento le iba a provocar una reacción. No cabe duda de que se vivieron momentos de gran incertidumbre. Algunos medios, incluso, llegaron a publicar que la protésico se encontraba al filo de la muerte.

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Pasado el tiempo, y ya recuperada, Campanario intervenía telefónicamente en el programa Estando contigo -dirigido por Vicente Serrano y presentado por Alfonso Hevia y Juli Rubio– para explicar, por vez primera, cómo se encuentra tras recibir el alta hospitalaria: «Estoy deseando volver a trabajar, la verdad es que estoy profundamente agradecida a los médicos y a las enfermeras del hospital porque han sido mis ángeles en estos días», ha explicado. Tan guerrera como siempre, María José también ha querido explicar que, en efecto, algunas de las informaciones le han producido mucho dolor: «Son titulares muy desagradables que afectan porque mi hija ya es mayor. No tiene mucho sentido porque, obviamente, el peligro ya había pasado».

¿Se separa de Jesulín de Ubrique?

Aprovechando que Campanario tenía evidentes ganas de hablar, los periodistas no han dudado en preguntarle acerca de su situación matrimonial, pues de nuevo se habla de crisis en su matrimonio con el torero: «Es el día de la marmota. Te levantas y ya está la información. Es agotador». Ante su respuesta, la contrarréplica no se ha hecho esperar: «Se miente tanto que tendría que estar todo el día en los juzgados. Y yo me pregunto, ¿para qué? Para estas cosas tan banales prefiero no hacer nada».