Jesulín de Ubrique, conocido por su trayectoria como torero y figura mediática, ha sido el centro de atención en los últimos días tras su ingreso de urgencia en el Hospital Regional de Málaga. La noticia de su estado de salud se convirtió en tema de interés público luego de que se conociera que el diestro había sufrido un microinfarto. Sin embargo, en una actualización reciente, Jesulín ha aclarado que lo que realmente experimentó fue una angina de pecho y no un infarto, como se pensó en un principio.
2El estado de salud del torero
Una angina de pecho es un tipo de dolor en el pecho causado por la reducción del flujo sanguíneo al corazón, y aunque no es tan grave como un infarto, es un síntoma que requiere atención médica inmediata. Los especialistas indicaron que Jesulín debía mantenerse en reposo y seguir las indicaciones médicas para asegurar su recuperación y evitar complicaciones futuras.
Jesulín explicó que, durante el episodio, acudió al hospital con la compañía de su compadre, sin haber informado previamente a María José Campanario. «Cuando la llamaron casi se muere del susto. Al poco tiempo, nos pusieron en contacto a través de una videollamada y ya se vistió y se vino conmigo. La verdad es que tenemos que darle las gracias al hospital y a sus sanitarios por lo bien que nos han tratado», dijo Jesulín, expresando su agradecimiento hacia el personal médico que lo atendió.
En sus declaraciones posteriores, Jesulín confesó que el incidente le supuso «el susto más grande» de su vida. «No esperaba que pudiera pasarme algo así, me he llevado el susto más grande de mi vida. Le he visto las orejas al lobo», reconoció el torero, quien manifestó su sorpresa y preocupación por el episodio que vivió. A pesar del susto y de la recomendación médica de reposo, Jesulín se mostró con ánimos de recuperarse y volver a sus actividades cotidianas.
En tono más ligero, Jesulín mencionó que ya había consultado con su doctor sobre la posibilidad de participar en una corrida programada para el día 18. «Aunque la vida ya me ha dado toques con las cornadas de los toros y el accidente de coche, no paro, soy un poco polvarilla», bromeó el torero, mostrando su inquebrantable espíritu y deseo de regresar a sus actividades habituales.