Daniel Sancho ha recibido su sentencia del juicio por el asesinato del médico colombiano Edwin Arrieta. La pena que deberá cumplir ha sido más dura que la que esperaba su defensa: el hijo del actor Rodolfo Sancho ha sido condenado a cadena perpetua. El anuncio de la condena ha sorprendido muchísimo a la prensa y a la familia, aunque era una de las determinaciones esperadas.
En los próximos días será trasladado a Surat Thani, la prisión que se le ha asignado, que cuenta con características durísimas en comparación con lo que ha vivido hasta ahora en la prisión de Koh Samui, donde se hallaba retenido de forma preventiva. Una gran inquietud asalta a su familia, y a él mismo. Hay algo que preocupa especialmente al condenado, que deberá cumplir esta condena fuera de su país de origen.
La preocupación de Daniel Sancho
Lo primero que ha preguntado Daniel Sancho al recibir la noticia del traslado es si en la cárcel de Surat Thani hablan inglés. La misma preocupación atormenta a su familia y a la defensa, dado que si no es así, el hijo de Rodolfo Sancho podría tener muchos problemas para integrarse y tener ciertas posibilidades de sociabilidad dentro del complejo.
Las autoridades tailandesas están organizando el traslado que tendrá lugar en los próximos días, mientras las dudas carcomen la integridad de Daniel Sancho. Su nuevo destino es menos amable y con unos horarios y programas mucho más exigentes. Al joven acusado le preocupa no poder entenderse o que no haya otras personas que hablen español o inglés. Podría volver todavía más dura su situación este aislamiento.
Las duras condiciones de la cárcel
La cárcel de Surat Thani es una de las utilizadas por la justicia tailandesa para recluir a los presos que hayan cometido delitos de sangre. En ella viven numerosos presos de diferentes países; de hecho, es una de las cárceles del país que alberga a una mayor cantidad de extranjeros. Estimamos, por tanto, que Daniel Sancho podrá encontrar con quién hablar.
La realidad de Daniel Sancho es dramática, pero su familia no baja los brazos. Su padre ha dicho públicamente que seguirán intentando todo lo posible por sacar a su hijo de esta pesadilla. La incógnita sobre el futuro de Daniel Sancho sigue pendiente. La defensa podrá recurrir en el próximo mes para suavizar la condena, pero de momento tendrá que acostumbrarse a esta dura prisión.