La infanta Elena se suma al cántico más polémico de la celebración de España

Infanta Elena
Infanta Elena

La Infanta Elena da la nota

La infanta Elena ha protagonizado un polémico momento durante los festejos por el triunfo de la Selección Española de Futbol en la Eurocopa, al sumarse a un cántico que ha dado muchísimo de qué hablar. De este modo, la hija de Juan Carlos ha tenido un comportamiento «vergonzoso» durante dicha celebración, que se suma al de muchas otras personas que protagonizaron una serie de hechos lamentables que van desde el vandalismo hasta agresiones a la policía e insultos xenófobos, como se ha podido ver en las noticias.

España se ha convertido en campeona de la Eurocopa 2024, y es una noticia que supone muchísima alegría para los aficionados al fútbol. Sin embargo, la conquista también ha dado lugar a situaciones que han dado mucho de qué hablar. Una de las más destacadas ha sido la forma en la que la infanta Elena ha decidido sumarse a los festejos entonando uno de los cantos deplorables que han demostrado la ignorancia y cierto reflujo franquista que todavía puja por asomar a la superficie.

El lamentable espectáculo

Es bonito celebrar el triunfo pero cuando la felicidad se combina con una serie de comentarios y actitudes de rechazo a los otros se convierte en un problema, y de esos problemas que nos convendría erradicar de nuestra cultura. Más allá del vandalismo urbano que hemos visto estos días y que resulta lamentable, las actitudes de la afición han sido deplorables, sobre todo porque incorporan elementos de disputa entre países que generan roces peligrosos.

El famoso cántico que entonó la infanta Elena como celebración que dice «Gibraltar español» es una muestra clara de la actitud deleznable del país durante los festejos. Si a esto le sumamos que en el plantel tenemos a figuras como Carvajal y Joselu, cuyas simpatías a los grupos ultras y racistas es de conocimiento público, digamos que deberíamos preocuparnos. Ahí es cuando se ve que esto no sólo se trata de fútbol, de la hermosa vibración del deporte competitivo.

La infanta Elena hace el ridículo

La celebración en Cibeles ha propiciado el escenario perfecto para el españolismo más asqueroso. Todo lo que había sido conquistado en el campo de juego fue desprestigiado de un plumazo. Cual si hubiera resucitado el dictador para imponer su último deseo. Lo peligroso es pensar que, en caso de que Inglaterra hubiese podido remontar, las mismas personas que alaban al equipo habrían hecho responsables del fracaso a Yamal y a Nico Williams.

En medio de esta España casposa que se hizo con el protagonismo de la tarde, estaba la infanta Elena, con una actitud infantil y patética sumándose a los cánticos ultras contra los ingleses, con Gibraltar como eje central. Un espectáculo lamentable que ha provocado reacciones tremendas en las redes sociales. La victoria se ha visto ensombrecida por estas actitudes que ponen en peligro todo lo conseguido en democracia.