La princesa Leonor revoluciona la Casa Real
La princesa Leonor alcanza su mayoría de edad y la casa real deberá ajustarse a los cambios que se vienen. La mayoría de edad de una heredera al trono es un hecho que convulsiona y causa transformaciones a todos los niveles. Su incorporación a la vida institucional debe ser pensada y realizada con cuidado. Y así lo están haciendo en Zarzuela, donde dan a entender que han estado esperando con ilusión este momento.
El pasado octubre la princesa Leonor juró la Constitución y, desde entonces, se han sucedido una serie de cambios en sus apariciones públicas y en la vida de la familia real que se han ido manifestando poco a poco. El hecho de que se hayan ido dando de esta manera indica que su familia ha pensado cuidadosamente de qué manera sería su llegada a la vida pública adulta y han cuidado y guiado con mimo cada uno de sus pasos.
El X Aniversario de la proclamación de Felipe VI
Una vez un heredero o heredera alcanza la mayoría de edad su ascenso al trono es ya imparable, incluso si su antecesor está en plenas facultades. En el caso de la actual familia real, pese a que Felipe está en la cumbre de su apogeo, se nota que ya todos están pensando en el reinado de Leonor y la están preparando con cautela para cuando llegue este momento.
Esto pudo verse con claridad en la celebración del X aniversario de la proclamación de Felipe VI donde la princesa Leonor tuvo un lugar protagónico, quien acompañó muy de cerca a su padre en esos momento. Cabe mencionar que para celebrar su quincuagésimo aniversario de vida, Felipe le entregó el Toisón de Oro, la máxima condecoración de la Monarquía Española.
El entrenamiento cuidadoso
Cuando Felipe VI llegó al trono lo hizo en condiciones poco favorables para la Zarzuela, pero después de haber vivido un entrenamiento dedicado y pudiendo hacerse cargo del legado de su padre con responsabilidad. Aunque cada vez sea más difícil sostenerse en ese lugar, teniendo en cuenta el gran debate que existe en España en torno a la anacronía que sucede mantener al mismo tiempo un espíritu republicano.
De momento, la princesa Leonor tiene la posibilidad de acceder a un entrenamiento sin riesgos, guiada por sus padres y conociendo de forma profundo el funcionamiento del sistema político y gubernamental. La mayoría de edad de la princesa supone muchos cambios y reajustes en las actividades públicas de la familia real, aunque seguramente también aporta un tono de frescura a un ambiente un tanto recalcitrante.