Pedro Sánchez, presidente del Gobierno español, ha demostrado una notable transformación física desde su ascenso al poder. Esta evolución no ha pasado desapercibida, especialmente en su rostro, donde las mejoras estéticas son evidentes. Pero, ¿qué hay de su esposa, Begoña Gómez? A pesar de enfrentarse a una imputación con fecha para declarar el próximo 4 de julio, Gómez ha lucido impecable en eventos recientes, como el X aniversario de la proclamación del Rey Felipe.
En un intento por desentrañar los secretos detrás de su renovada apariencia, El Debate consultó a varios médicos especialistas en medicina estética. El consenso fue claro: Begoña Gómez ha recurrido a procedimientos estéticos para mejorar sus facciones.
La doctora Raquel García, de la Clínica Ibiza, destaca varios posibles retoques en la imagen de Begoña. Entre ellos, menciona un remodelado labial utilizando ácido hialurónico. “Ha cambiado la forma de las cejas, que antes estaban tatuadas de manera exagerada y más tosca, y ahora lucen más naturales o con un fino microblading”, explica García. Este sutil cambio en el diseño de las cejas añade un aire de naturalidad y frescura al rostro de Gómez.
Además, la doctora apunta hacia un posible tratamiento en los pómulos de Begoña: “Es muy probable que haya recibido un aumento con ácido hialurónico para dar volumen y redefinir los contornos faciales”. Este procedimiento es común en la medicina estética y ayuda a conseguir una apariencia más juvenil y definida sin necesidad de intervenciones quirúrgicas mayores.
El brillo y la salud visible en la piel de Gómez también han despertado sospechas. Según la experta, es muy probable que haya recibido un tratamiento para estimular la producción de colágeno. “Estos tratamientos están diseñados para mejorar la elasticidad y firmeza de la piel, además de reducir los signos de envejecimiento”, comenta. Un ejemplo de estos métodos es la radiofrecuencia fraccionada, una tecnología avanzada que promueve la regeneración celular sin necesidad de procedimientos invasivos.
Tanto la doctora García como el doctor Ernesto Pérez Hernández de Clínica FEMM coinciden en que Begoña ha recurrido a inyecciones de neuromodulador, conocidas como bótox. Según García, esto se evidencia en las fotografías donde Begoña sonríe, ya que no muestra arrugas en la frente, lo cual es indicativo del efecto de este tratamiento. “La toxina botulínica se utiliza para reducir estas arrugas, proporcionando un aspecto más suave y juvenil”, explica la doctora.
El doctor Hernández también señala una mayor definición y estilización en el rostro de Begoña Gómez en comparación con años anteriores. “A juzgar por la evolución en las fotografías, su rostro ahora presenta ángulos más definidos y una simetría mejorada, posiblemente gracias a tratamientos combinados como skinboosters o equipos de luz pulsada”, menciona el doctor. Estos tratamientos buscan minimizar cualquier huella estética visible, creando una apariencia armoniosa y femenina.
Sin embargo, las opiniones no están del todo alineadas. El doctor Hernández sugiere que podría haber duda sobre la realización de cirugías como blefaroplastia y rinoplastia, aunque parece más probable que los cambios sean resultado de tratamientos de mantenimiento con ácido hialurónico.
La rinoplastia de Begoña Gómez
Por otro lado, la doctora Rocío Mourelle de Clínica Trevi es más rotunda en su diagnóstico: “Lo que parece es que se ha realizado una rinoplastia porque tenía las fosas nasales muy grandes y visibles y le hacían la cara muy tosca. Ahora tiene una nariz fina con la punta elevada y las fosas diminutas”. Mourelle opina que estos retoques han hecho que Begoña Gómez esté “mucho más guapa, pero el cambio es muy radical”.
A pesar de las diversas opiniones, todos los expertos coinciden en que Begoña Gómez ha optado por la naturalidad en sus retoques, siguiendo la tendencia actual entre los famosos de procedimientos que ofrecen resultados naturales y sutiles. Esta tendencia evita el aspecto demasiado artificial o rellenado, logrando una apariencia mejorada sin exageraciones.
La transformación de Begoña Gómez pone de relieve cómo la medicina estética se ha convertido en una herramienta clave en el mundo de la política, donde la imagen y la percepción pública juegan un papel crucial. Pedro Sánchez y su esposa no son ajenos a estas tendencias, y sus renovadas apariencias reflejan un enfoque meticuloso hacia el mantenimiento de una imagen pulida y profesional. Mientras la controversia rodea su situación legal, la apariencia de Begoña Gómez sigue siendo un punto de interés y especulación pública, mostrando cómo el poder y la estética pueden ir de la mano en la esfera política.