El cantante Bertín Osborne continúa en el ojo del huracán tras reconocer la paternidad de su hijo con Gabriela Guillén. Aunque ambos llegaron a un acuerdo amistoso y emitieron un comunicado conjunto hace una semana, la demanda de paternidad interpuesta por la modelo sigue su curso legal.
¿Un simple trámite o un nuevo capítulo en la polémica? El pasado 20 de mayo, Bertín Osborne y Gabriela Guillén se sometieron a pruebas de ADN en un laboratorio privado. El resultado, positivo, llevó al presentador a reconocer la paternidad de su hijo. Sin embargo, la justicia sigue su curso y la demanda de paternidad sigue en pie.
Las pruebas de ADN: ¿Una obligación judicial?
Este lunes, Gabriela Guillén y su bebé acudieron al Instituto Nacional de Toxicología para someterse a nuevas pruebas de ADN, a pesar de las ya realizadas en mayo. Esta decisión parece indicar que, a pesar de la reconocimiento de la paternidad, la justicia aún no ha dado el caso por cerrado.
Se espera que en los próximos días sea Bertín Osborne quien tenga que someterse a las pruebas de ADN, un trámite que parece inevitable para formalizar la paternidad ante la ley.
Bertín Osborne: «Volcado en su trabajo»
A pesar de la polémica y de la espera por la decisión judicial, Bertín Osborne se encuentra completamente volcado en su trabajo, tal y como ha asegurado en varias ocasiones.
Tras su fallido y polémico concierto del pasado 13 de junio en San Agustín de Guadalix, el cantante ha seguido con sus compromisos profesionales. Le hemos visto llegar a una grabación, esquivando las preguntas de la prensa, y buscando la discreción en su llegada.
El chófer del artista ha intentado protegerlo de los reporteros, pero el cantante finalmente no ha podido evitar las preguntas sobre las pruebas de ADN. Bertín Osborne ha preferido guardar silencio y no ha confirmado si finalmente tendrá que someterse a las pruebas.
La situación legal sigue abierta, y las pruebas de ADN parecen ser el último paso para cerrar el caso de paternidad. Mientras tanto, Bertín Osborne continúa con su carrera profesional, esperando una resolución judicial que podría marcar un nuevo capítulo en su vida.